Schroeder pactará con la oposición la reforma de la sanidad alemana
Gobierno y oposición discrepan en la forma de recortar los gastos
El canciller alemán, Gerhard Schroeder, y la líder de la oposición conservadora, Angela Merkel, acordaron ayer trabajar juntos para llevar adelante la reforma de la sanidad germana antes de mediados de julio.
La reforma sanitaria es uno de los desafíos políticos de la actual legislatura y el Gobierno rojiverde necesita el apoyo democristiano en la Cámara Alta, ya que la CDU-CSU tiene mayoría en el Bundesrat, la Cámara territorial. La aprobación por parte de los länder es imprescindible para llevar a cabo el programa de recortes sociales del canciller.
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En una reunión en el Reichstag de Berlín, Schroeder y Merkel se pusieron como meta terminar las negociaciones a mediados de julio. El Gobierno ha llevado al Parlamento una propuesta de reforma sanitaria dirigida ante todo a reducir los costos y a aumentar la eficiencia del sistema.
Las dos principales herramientas para lograr una reducción de gastos son los recortes en las prestaciones que pagan las aseguradoras médicas, así como un cambio del régimen de financiación de ciertos subsidios, como la maternidad o la odontología.
RECORTE DE PRESTACIONES
Además se han establecido una serie de cambios estructurales para reducir los costes y dar una mayor eficacia al sistema. Se creará un "Centro Alemán para la Calidad de la Medicina", cuya labor principal será evaluar tratamientos médicos y de medicamentos para permitir una revisión permanente del catálogo de prestaciones de las aseguradoras.
La Unión Cristianodemócrata (CDU), principal partido de oposición en Alemania, ha acordado un plan de reforma sanitaria que difiere en algunos puntos del propuesto por el Gobierno y que deberá servir de base de discusión para tratar de llegar a un acuerdo.
En el plan de la CDU se contempla el ahorro de 53.000 millones de euros hasta 2010, a través de un recorte progresivo de prestaciones hasta ahora financiadas por las aseguradoras médicas. El Gobierno es partidario de que los trabajadores asuman un seguro privado que les garantice el cobro de su salario en caso de enfermedad.
