La marcha protestante de Portadown transcurre sin incidentes
Pese a la prohibición, un año más, del acceso de la Orden de Orange al barrio católico de Garvaghy Road
La marcha de la Orden de Orange por la ciudad norirlandesa de Portadown transcurrió este domingo en paz y sin incidentes, pese a que, por sexto año consecutivo, las autoridades habían prohibido a los participantes desfilar por la zona católica.
En lugar de los disturbios de otros años, cuando los protestantes intentaban escalar las barreras y superar los obstáculos para seguir su marcha, en esta ocasión se limitaron a entregar una carta crítica y de protesta a la policía.
La calle Garvaghy, de mayoría católica, fue cerrada para impedir el paso de los orangistas con altas estructuras metálicas y numerosos policías y soldados.
Sin embargo, las fuerzas de seguridad no tuvieron que intervenir ya que los participantes, tras el tradicional servicio religioso en la capilla del barrio de Dumcree de Portadown, volvieron sobre sus pasos de forma pacífica.
La marcha de la Orden de Orange, que se celebra por estas fechas en varios puntos de Irlanda del Norte, conmemora la victoria del rey Guillermo III de Orange sobre el católico Jacobo II en la batalla del Boyne de 1690.




