El asesinato de cuatro mujeres en sólo 24 horas siembra la alarma en Moscú
Se investiga si estas muertes están relacionadas con el estrangulamiento de otras seis jóvenes desde el 1 de julio
El hallazgo de cuatro cadáveres de mujeres en Moscú en las últimas 24 horas ha causado la alarma en la capital rusa, donde se teme que actúe un asesino en serie al que ya le atribuyen la muerte de otras seis jóvenes desde comienzos de mes.
Fuentes de la policía informaron este domingo de que ayer sábado fueron hallados los cuerpos de cuatros mujeres de entre 17 y 40 años asesinadas en diversos sectores de Moscú.
Dos de las víctimas presentaban traumatismos cráneo-encefálicos, mientras que las otras dos, según la investigación preliminar, habrían muerto por estrangulamiento.
Un portavoz de la policía dijo a la agencia Interfax que las pesquisas indican que esos cuatro crímenes no están vinculados entre sí, aunque no se descarta la posibilidad de que algunos de ellos estén conectados con la serie de seis asesinatos cometidos desde el pasado 1 de julio en los suburbios del norte de la capital rusa. Desde esa fecha, al menos seis mujeres jóvenes han muerto estranguladas tras ser violentadas sexualmente.
La Fiscalía de Moscú indicó hace unos días que es poco probable que se trate de un asesino en serie, pero en los medios policiales se inclinan por pensar que los crímenes han sido cometidos por una misma persona.
"Los asesinatos son idénticos. Las víctimas primero fueron vejadas y después las mataron estrangulándolas. Esto sólo puede hacerlo una persona con sus facultades mentales perturbadas", dijo un portavoz de la policía de Moscú a la agencia oficial ITAR-TASS.
A favor de la hipótesis de que se está ante el caso de un asesino en serie apunta el hecho de que cinco de los seis crímenes se cometieron en la zona norte de la capital, así como el carácter periódico con que fueron perpetrados, cada dos o tres días.
La policía, que hasta ahora no ha informado de avances en las investigaciones, ha hecho llamamientos a las jóvenes para que se abstengan de pasear por la noche por parques y lugares poco concurridos, así como de trabar conversación con desconocidos.
En opinión de psicólogos citados por la prensa rusa, los maníacos sexuales a veces suelen tener un trato muy agradable y ser muy comunicativos, con lo que distraen la vigilancia de sus víctimas potenciales.
El año pasado, fue detenido un tal Vladímir Belov, que aterrorizó durante meses a los habitantes de un barrio también en el norte de Moscú, donde mató y atracó a cerca de un centenar de personas, en su mayoría mujeres.
Belov fue incapaz incluso de precisar el número de sus víctimas porque, según confesó, "mataba todos los días".
Esta nueva ola de asesinatos en Moscú ha hecho resucitar el fantasma del mayor maníaco en la historia reciente de Rusia: Andrèi Chikatilo, más conocido como el "carnicero de Rostov".
Chikatilo fue ejecutado el 15 de febrero de 1994 después de ser hallado culpable de violar y asesinar a 52 niños y mujeres entre 1970 y 1980.
En declaraciones a la prensa tras su detención, Chikatilo, ex profesor de filosofía marxista-leninista, dijo ser comunista convencido, muy religioso, pero también una víctima del sistema soviético.




