El ex presidente de Nicaragua, encarcelado por corrupción
Arnoldo Alemán, de 57 años, vuelve a la prisión conocida como "El Chipote"
El ex presidente de Nicaragua Arnoldo Alemán está recluido desde el lunes en una cárcel común de Managua por orden judicial, procesado como supuesto autor de diversos delitos de corrupción.
Alemán, ex alcalde de Managua, ex presidente de la Asamblea Nacional y diputado ante el Parlamento Centroamericano (PARLACEN), se convirtió así en el primer ex presidente de Nicaragua en ser recluido en una celda de la Dirección de Investigaciones Criminales(DIC) en esta capital.
Tras perder el lunes el beneficio del arresto domiciliario de que gozó durante ocho meses, Alemán, de 57 años, vuelve así a la prisión conocida como "El Chipote", situada en La Loma de Tiscapa, en el sector sur de Managua, en la que ya estuvo preso una vez.
En la anterior ocasión, Alemán estuvo en El Chipote durante el gobierno sandinista (1979-1990) por oponerse a ese règimen en su calidad de líder de los cafetaleros de Nicaragua, por lo que los sandinistas le acusaron de contrarrevolucionario.
La diferencia es que ahora Alemán es reo de la justicia común, acusado de haber cometido fraude, lavado de dinero y delito electoral durante su mandato presidencial (1997-2002).
Carlos Miguel Alemán Cardenal, hijo menor del procesado, declaró a la prensa que su padre -desde la celda donde está desde ayer- está en condiciones de pasar el Gobierno del presidente Enrique Bolaños "luchando para sacar adelante a Nicaragua".
Pero Mauricio Martínez, abogado defensor de Alemán, dijo a los periodistas que su cliente "está muy desgastado psicológicamente y padece de una serie de trastornos que sólo los mèdicos pueden determinar".
En este sentido, dijo que pedirá que sea examinado por un mèdico forense, ya que ayer sufrió una subida de la presión arterial. El diputado Enrique Quiñónez, jefe del grupo parlamentario liberal, insistió en que Alemán es objeto de una persecución política y declaró que es un "rehèn del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), entregado por Enrique Bolaños".
Quiñónez aseguró que a Alemán "no lo quebraron ni doblegaron los sandinistas y ahora se va a mantener con dignidad en 'El Chipote', y lo que nos ha dicho es que los liberales nos mantengamos unidos".
Otros dirigentes liberales afectos a Alemán manifestaron a la prensa que organizarán protestas contra la decisión de la jueza Juana Mèndez de recluir al ex presidente en una celda común.
"Ojalá que estas protestas no se nos salgan de control", dijo Quiñónez. Algunos militantes liberales dijeron en tono exaltado, a las puertas de la DIC, que están dispuestos a lanzarse a las calles o empuñar las armas para que Alemán recobre su libertad.
Anoche tambièn se efectuaron violentas protestas de liberales en la sede del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), controlado por Alemán, y la policía actuó para restablecer el orden.
El máximo líder sandinista, Daniel Ortega, expresó su respaldo a la decisión adoptada por Mèndez y argumentó que hay que fortalecer el Poder Judicial.
Ortega negó que èl haya influido en el dictámen de Mèndez -de militancia sandinista- y dijo que "es ella la que está tomando sus
decisiones".
A juicio del líder opositor, Alemán ahora está más seguro que en su hacienda El Chile, 26 kilómetros al sur de Managua, donde estuvo bajo arresto domiciliario desde diciembre de 2002.
La jueza Mèndez espera poder dictar una sentencia en este caso dentro de dos meses. El traslado de Alemán a una cárcel común se produjo en vísperas de que hoy venza el plazo para que la Corte Centroamericana de Justicia (CCJ) se pronuncie sobre la demanda que presentó contra el Estado de Nicaragua, al que acusa de violar sus derechos humanos.
Alemán alega que los tribunales de Managua le abrieron proceso a
pesar de que goza de inmunidad por ser diputado ante el PARLACEN. Está previsto que la CCJ se pronuncie hoy sobre si Alemán tiene o no inmunidad y, según los líderes liberales, un fallo a su favor anularía todo lo actuado por los jueces de Managua.




