Una teatro británico retirará "El graduado" si la actriz no se desnuda
Al contrario que Kathleen Turner y Jerry Hall, la actriz inglesa Glynis Barber modifica el guión y permanece vestida en todo momento
Un teatro británico ha amenazado con retirar de cartel la obra "El graduado" porque la actriz principal, Glynis Barber, no aparece desnuda, a diferencia de Kathleen Turner y Jerry Hall en otras representaciones.
El teatro Cliffs Pavilion, en Southend (sureste de Inglaterra), ha programado la obra "El graduado" para octubre, pero amenazó con cancelarla al enterarse de que, durante la gira que lleva a cabo por diferentes ciudades inglesas, Barber -que interpreta a la cuarentona y seductora señora Robinson- no se deja ver "al completo".
La polémica escena es una más de las muchas en las que la señora Robinson -interpretada en la aclamada película de 1967 por la actriz Anne Bancroft- seduce a Benjamin Braddock -Dustin Hoffman en el filme-, un joven licenciado.
La obra de teatro "El graduado" ya ha sido representada por otras compañías en el West End londinense, donde siempre ha logrado un gran éxito, a menudo por la expectación creada por los desnudos de actrices como Kathleen Turner y Jerry Hall, ex esposa del cantante del grupo de rock Rolling Stones, Mick Jagger.
Durante la citada escena, la señora Robinson salía del baño con una toalla enrollada a su cuerpo de la que luego se desprendía, con lo cual su cuerpo quedaba a la vista del público durante unos veinte segundos.
Y parece que el teatro Cliffs Pavilion ha llegado a la conclusión de que, sin ese desnudo, no podrá colgar el cartel de "no hay entradas". Pero un portavoz del productor, Sacha Brooks, respondió hoy que Barber, de 47 años y protagonista de películas como "Al borde de la locura" (1989), mantendrá la toalla en su sitio.
"Nunca prometimos un desnudo durante la gira regional y Glynis Barber no va a cambiar su actuación en Southend, al menos que yo sepa", afirmó. "Hemos recibido la queja del teatro de Southend, pero ninguna más, y la obra ya ha sido programada por veinte teatros", añadió el portavoz.
Pero Charles Mumford, encargado del teatro de Southend, ha explicado al diario The Daily Telegraph que él no lo entendió así. "El problema es cómo me lo vendieron. Evidentemente, si ella no se desnuda, no se desnuda, pero eso no fue lo que me vendieron. Esta escena fue muy famosa en Londres", declaró.
De todas formas, el portavoz de la productora manifestó que aún no estaba claro qué iba a ocurrir en Southend, dado que el teatro y la productora estaban negociando. "Southend parece decir que ella sale menos desnuda de lo que ellos pensaban y que eso no es suficiente. Estoy bastante desconcertado; en lo que a mí concierne, hay desnudo suficiente", argumentó.
