Mueren diez policías iraquíes en una tiroteo por equivocación con soldados de EEUU
Dos soldados muertos y otro herido en distintos sucesos en Irak
Al menos diez policías y miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes han muerto y otros cinco han resultado heridos en un intercambio de disparos con un grupo de agresores, en el que han intervenido también soldados estadounidenses, según han informado testigos y fuentes policiales.
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Diez miembros de las fuerzas iraquíes y un guardaespaldas jordano murieron hoy en uno de los mayores "incidentes" registrados en el bastión suní de Faluja, en el centro de Irak, después de que soldados estadounidenses dispararan contra los policías iraquíes que se encontraban persiguiendo a hombres armados. El suceso, que testifica el nerviosismo de las tropas norteamericanas en Irak, provocó la ira de los policías y habitantes de la ciudad.
Este tiroteo es uno de los sucesos más graves producidos en esta ciudad, donde las tropas de Estados Unidos son casi a diario víctima de ataques de partidarios del antiguo régimen de Sadam Husein y de activistas islamistas suníes.
Esta es también la segunda vez en 48 horas que mueren policías iraquíes por disparos de soldados norteamericanos. El pasado miércoles, un policía murió y otro resultó gravemente herido por disparos de militares cuyo convoy fue atacado en la entrada de Faluja.
OBUSES Y AMETRALLADORAS
Según el comisario de policía Qahtan Adnan Hamad, una unidad compuesta por diez miembros de las fuerzas de seguridad y cinco policías estaba persiguiendo de madrugada a un vehículo en el que viajaban hombres armados, cuando fueron el blanco de disparos de tropas estadounidenses desplegadas cerca del hospital militar jordano de Faluja (60 kilómetros al oeste de Bagdad), en la entrada de la ciudad.
Los diez miembros de las fuerzas de seguridad fallecieron por los disparos, y los cinco policías resultaron heridos y fueron ingresados en el establecimiento, precisó. "El guardaespaldas (jordano) del director del hospital murió en el tiroteo", afirmó un capitán del Ejército jordano.
Asimismo, los disparos de obuses y de ametralladoras alcanzaron de lleno el centro sanitario provocando heridas en once personas -cinco de ellas iraquíes, otras cinco jordanas y una iraquí- empleadas en el hospital, según fuentes oficiales.
Hoy viernes, un grupo de periodistas constató impactos de tres obuses y balas de gran calibre en la fachada del edificio. Otras dos alas del hospital no se vieron afectadas, concretamente la que acoge a los heridos estadounidenses y otra en la que se encuentran los pacientes iraquíes.
Uno de los policías heridos, Wissam Mahmud Jassem, acusó a las fuerzas estadounidenses de haber "tendido una emboscada a la unidad de Policía". "Les gritamos: `Policía, somos de la Policía!, pero los soldados continuaron disparando", afirmó.
El comandante de Policía encargado de las patrullas, Jalal Sabri, afirmó que le "sorprendió este incidente, del que no conocemos las razones". Para un teniente de policía, Mazen Hamid, este incidente testifica "la histeria de las fuerzas estadounidenses". "Quizás quieran demostrar que la Policía ha fracasado y utilizar esto como pretexto para tomar el control". "¿Cómo explicar si no la causa de su rechazo a entregarnos el equipamiento y material necesarios para llevar a cabo nuestra misión?", añadió.
Una gran tensión se podía percibir en la ciudad, donde numerosos habitantes enfurecidos se reunieron delante de la sede de la Policía, algunos de ellos para exigir los cuerpos de los miembros de las fuerzas de seguridad que no han sido todavía entregados por los estadounidenses a sus familias.
Las fuerzas iraquíes que perseguían un vehículo BMW con hombres armados se encontraron en medio de un fuego cruzado de las fuerzas estadounidenses a nivel del hospital. Esta tarde, un portavoz norteamericano se limitó a indicar que "un soldado estadounidense resultó herido así como otros cinco elementos neutros" en un "incidente".
Por otro lado, en la ciudad de Ramadi, situada más al oeste, "dos soldados estadounidenses murieron y siete resultaron heridos en un tiroteo después de una incursión" llevada a cabo de madrugada en esta ciudad, declaró una portavoz, el sargento Amy Abbott.
Otros tres soldados estadounidenses resultaron heridos en un ataque con explosivo contra un convoy que circulaba por la carretera que lleva de Faluja a Bagdad, indicó.
Según testigos, un total de tres ataques con explosivos fueron dirigidos en un intervalo de cinco horas contra convoys estadounidenses en esta carretera. En un último ataque a las 17:00 hora local (15:00 hora española), tres civiles iraquíes, entre ellos dos niños, resultaron heridos por disparos estadounidenses en respuesta a los ataques.
En el norte de Irak, un civil perdió la vida y otro resultó herido en Houwaija, en la región de Kirkuk, por disparos de soldados estadounidenses después de un ataque con granada y mortero, según fuentes médicas.