Sociedad

La rectificación de Gallardón, acogida con "satisfacción" en el PP, es una "muestra de debilidad" para el PSOE

Zapatero se pregunta por los "otros impuestos" que ha subido el alcalde madrileño

Madrid

El anuncio del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, de que el Ayuntamiento "rectificará" el recargo del 50 por ciento del Impuesto de Bienes Inmuebles para las viviendas vacías ha sido acogido con satisfacción en el PP, mientras que desde el PSOE se advierte de que aún mantiene subidas en ocho impuestos.

La decisión de Ruiz-Gallardón ha sido acogida con "satisfacción" en las filas del PP y, así, su coordinadora de Organización, Ana Mato, aseguró sentirse convencida de que "será un magnífico alcalde para la ciudad".

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Tras explicar que el secretario general del partido, Mariano Rajoy, mantuvo una reunión con Ruiz-Gallardón cuyo contenido rehusó comentar, Mato reiteró que el PP "está satisfecho" y que "sigue trabajando para que haya más viviendas" pero que "no va a adoptar medidas que perjudiquen a los ciudadanos".

También el secretario de Estado de Economía, Luis de Guindos, valoró la decisión del alcalde madrileño, que, en su opinión, ha sido tomada "tras una reflexión" y "de forma autónoma".

LOS OTROS OCHO IMPUESTOS

Desde el PSOE, sin embargo, su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó que la retirada del anunciado gravamen a las casas vacías "es una finta estratégica que no repone la situación" ya que aún "hay ocho impuestos más que sube el PP y Gallardón" en la capital.

El alcalde de Madrid "ha hecho a las claras y sin tapujos lo que hace el PP con engaños: subir los impuestos", dijo el líder socialista, que señaló que "cabría preguntarse qué pasa con los otros ocho impuestos que ha subido el PP" en la capital.

"EL QUE SE MUEVE NO SALE EN EL BALCÓN"

Por su parte, el portavoz de IU en el Congreso de los Diputados, Felipe Alcaraz, que recordó que su grupo incluía en su programa electoral esta subida del IBI como mecanismo para fomentar el alquiler de las viviendas vacías, manifestó que "el que se mueve no sale al balcón de Génova (sede general del PP)".

Alcaraz afirmó que ésta era la única medida "progresista" del paquete de subidas impositivas decidido por el alcalde de Madrid y atribuyó la "marcha atrás" de éste a las "presiones fortísimas" ejercidas sobre él por el presidente del Gobierno, José María Aznar, el vicepresidente primero, Rodrigo Rato, y el candidato del PP a la Presidencia, Mariano Rajoy.

MUESTRA DE "EXTRAORDINARIA DEBILIDAD"

También se ha referido a la marcha atrás del alcalde de Madrid la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de la capital. Trinidad Jiménez ha dicho que la decisión demuestra "su extraordinaria debilidad" y ha lamentado que el regidor cambie de opinión "a la primera llamada que recibe" del PP.

Para Jiménez, la actitud de Ruiz-Gallardón en este asunto pone de manifiesto una "falta de coherencia y de criterio realmente llamativas" del regidor, al que criticó además por haber rectificado una decisión que ha defendido en las dos últimas semanas y hacerlo "después de una conversación con el secretario general del PP", Mariano Rajoy.

"Ruiz-Gallardón, ha dicho, ha dejado de ser ese verso libre, como le gustaba autocalificarse, a ser un político titubeante". La portavoz socialista en el ayuntamiento de Madrid destacó además que el alcalde ha rectificado "con los mismos argumentos que mantiene el PSOE".

SUMISIÓN A LOS PODERES ECONÓMICOS

La portavoz de IU en el Ayuntamiento de Madrid, Inés Sabanés, ha acusado por su parte al alcalde de "ceder a las presiones de su partido y a las de los grandes propietarios para dar marcha atrás y eliminar la única medida progresista que incluía en los Presupuestos".

Tras indicar que Gallardón mantiene una importante subida de impuestos para el 90% de los madrileños, Sabanés acusó al alcalde de "mostrar su debilidad ante los poderosos y su poder ante los más débiles", así como de intentar "dar una imagen falsamente progresista".

La concejal de IU rechazó cualquier excusa administrativa y legal "para tratar de enmascarar lo que sólo es un acto de sumisión a los poderes económicos y una concesión a la corriente más derechista de su partido".

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, asegura que el equipo que él preside nunca adoptarà una medida confrontada con la política fiscal del PP

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