Internacional

Un detenido de Guantánamo logra por primera vez un abogado

Según un comunicado del Pentágono

Washington

El Departamento de Defensa estadounidense designó a un alto cargo de la Marina como abogado defensor del detenido australiano en la base naval de Guantánamo David Hicks, aunque todavía no ha informado de los cargos que se le imputan al arrestado ni de la fecha del juicio militar.

El Pentágono ha comunicado que esta es la primera vez que se autorizan los servicios de un abogado militar para contribuir en la defensa de un presunto terrorista extranjero preso en Guantánamo.

El acusado es David Hicks, de 28 años, un australiano converso al islamismo detenido por tropas estadounidenses cuando luchaba junto a los talibán de Afganistán, en noviembre de 2001.

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Hasta ahora no se han fijado los cargos que se presentarán contra Hick y, por lo tanto, no se ha establecido una fecha para el juicio. Su nombre figuraba en una lista de seis prisioneros designados para ser procesados por un tribunal militar.

Australia alcanzó la semana pasada un acuerdo con EEUU sobre el juicio contra Hicks y otro prisionero australiano, y las autoridades norteamericanas aseguraron que no serán condenados a muerte en caso de ser declarados culpables.

Por otra parte, Australia ha recibido la promesa de que tanto Hicks como Habib -que así se llama el otro detenido- podrán regresar a su país a cumplir sus respectivas condenas, dijeron fuentes del Pentágono.

El mayor de Infantería de Marina, Michael Mori, visitará a Hicks en Guantánamo en "un futuro cercano" para informarle de que tiene la posibilidad de contratar los servicios de un abogado civil. Mori también informará a Hick sobre las normas jurídicas que incluyen la presunción de inocencia, la exigencia de probar la culpabilidad más allá de toda duda, así como la oportunidad que tiene el acusado de llamar testigos para que declaren en su favor.

Estados Unidos no reconoce a unos 660 presos recluidos en Guantánamo el carácter de prisioneros de guerra y los ha calificado como "combatientes enemigos" no acogidos a las leyes nacionales por encontrarse recluidos fuera del territorio.