Localizados los dos cuerpos de los montañeros sepultados en Huesca
Sigue sin poderse rescatar el cuerpo del joven sepultado en Cercedilla
Huesca
Miembros de los grupos de rescate de la Guardia Civil localizaron hoy en la zona del ibón superior de Bachimaña, en Panticosa (Huesca), los cadáveres de los dos montañeros de Albacete que fueron arrollados por una avalancha de nieve mientras realizaban una travesía de alta montaña.
Según fuentes del operativo de búsqueda, la localización de los cuerpos de ambos montañeros fue llevada a cabo por cinco especialistas del Cuerpo provistos de sondas y auxiliados por un perro especializado en la detección de personas bajo la nieve.
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La identidad de los montañeros fallecidos, que portaban sus documentos en sus respectivas mochilas, corresponde a José Francisco A.M. y Miguel Angel G.M., vecinos de Albacete, de 28 y 29 años de edad, respectivamente.
Una vez desenterrados los cuerpos, las difíciles condiciones climatológicas que se registraban en la zona del alud obligaron a los componentes del grupo de rescate a señalizar los cadáveres con una de las sondas y abandonar el lugar con rapidez ante el riesgo de nuevas avalanchas.
ALUDES POR EL VIENTO
El mal tiempo impide, asimismo, las labores de evacuación del montañero de Cercedilla de 19 años, Matías M.C., sepultado el pasado 28 de diciembre por un alud en la zona de la Brecha de Tucarroya, en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
A pesar de que los aludes se asocian habitualmente con las altas temperaturas, los más peligrosos son los desprendimientos provocados por el viento. Este fenómeno, denominado aludes de placa, es además, más peligroso: el 70% de las víctimas se produce en aludes provocados por el viento.
