Aena y los controladores pactan 'la paz' hasta abril de 2004

AENA y la Unión Sindical de Controladores (USCA) firmaron hoy un acuerdo por el que se prorroga hasta abril la ampliación de la jornada laboral realizada durante el año 2003, con lo que "durante este plazo se garantiza la operatividad, mientras continúan las negociaciones para alcanzar un acuerdo definitivo".

Según informó AENA, el acuerdo vigente sobre la ampliación de la jornada laboral de control finalizó el pasado 31 de diciembre, por lo que es necesaria su renovación y, hasta la firma del nuevo texto, el acuerdo de hoy "facilita la realización de la jornada ampliada necesaria para garantizar la operatividad y la prestación de un servicio de calidad".

Este acuerdo fue alcanzado en la reuniones que ayer y hoy mantuvo la Comisión Permanente -órgano negociador en el que están representadas ambas partes- tras los retrasos que se produjeron en los vuelos del aeropuerto de Barajas el pasado fin de semana por la falta de personal en el Centro de Control de Torrejón de Ardoz (Madrid).

Según AENA, la jornada laboral máxima de un controlador es de 1.200 horas al año, que, en la práctica, se reducen a 1.142 horas. Los descansos asignados en los turnos diurnos son del 33 por ciento de las horas de servicio y del 50 por ciento en los nocturnos.

Además, los controladores disponen de 45 días de vacaciones anuales que pueden verse incrementados en seis días más de libre disposición y diez horas más para el examen médico, informa AENA.

Por todo ello, asegura el ente público, "la jornada máxima efectiva real de un controlador oscila entre las 500 y 700 horas al año".

Actualmente hay 2.009 controladores, 654 más que en 1996, lo que supone un aumento de plantilla del 48,2 por ciento, de acuerdo con los datos de AENA.

Por otra parte, AENA lleva desde julio de 2001 sin convocar nuevas plazas para controladores. En ese mes entraron, como aspirantes, 265 personas. De ellos, casi la mitad esperan aún a ser llamados para iniciar su formación.

AENA reconoce el problema, afirma que se ha aumentado el ritmo de formación, que la escuela está al máximo de su capacidad (salen unos 140 controladores al año) y que no se puede ampliar porque los profesores son los propios controladores, y, como se ha visto, son necesarios en sus puestos.

Aeropuertos Españoles sí anuncia que este trimestre se realizará una nueva convocatoria para cubrir plazas, pero la formación de cada grupo precisa unos dos años. Hasta entonces no pueden dedicarse, sin el apoyo de un tutor, a las tareas de control.

En esta situación, AENA no da un plazo para completar su plantilla y dejar de recurrir a la prolongación de jornada de los controladores.