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La policía francesa detiene a otro supuesto miembro de ETA

La policía encontró su foto entre los papeles de los otros etarras arrestados esta semana

Un supuesto colaborador de ETA, el vasco-francés Diego Ibarra, fue arrestado hoy en Biarritz (País Vasco francés), a raíz de la detención, el lunes último, de dos presuntos responsables de logística de la banda en el suroeste francés, según informaron fuentes próximas a la investigación.

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Un documento con la fotografía de Ibarra, de 32 años, fue hallado entre los efectos incautados a los presuntos etarras Ibon Elorrieta Sanz y Luis Enrique Gárate Galarza. Ambos fueron arrestados el pasado lunes cerca de Cognac, a unos 150 kilómetros al norte de Burdeos, después de eludir un control de aduanas cuando transportaban en una furgoneta explosivos y armas para perpetrar atentados.

En el domicilio de Ibarra la policía halló documentos de apoyo a los presos de ETA, indicaron las fuentes. El supuesto colaborador de la banda está bajo custodia en la comisaría de Bayona, donde es interrogado. Ibarra es sospechoso de formar parte del aparato de logística de la organización terrorista que opera en Francia, según informaron fuentes de la lucha antiterrorista.

Natural de Biarritz, Ibarra fue militante de Segi, las juventudes del entorno proetarra, y en la actualidad reside en Bidart. Su detención fue practicada por agentes de la policía Judicial francesa con una orden de la juez antiterrorista Laurence Le Vert.

Mientras, se prevé que sean trasladados hoy a París Elorrieta y Gárate, así como los otros dos presuntos etarras Jon Kepa Preciado y Jon González González, detenidos en la madrugada del mièrcoles en un apartamento de Limoges (centro), donde se alojaban los dos primeros.

Los cuatro presuntos etarras, que guardan un silencio total, están bajo custodia en la comisaría de Limoges (centro) y serán trasladados a la capital francesa con vistas a su comparecencia ante un juez antiterrorista para su procesamiento.

El registro ayer del apartamento de Limoges dio pocos resultados, pero en cambio en el coche Peugeot 206 que estaba aparcado cerca del edificio se hallaron un ordenador y documentación en euskera, que van a ser examinados, indicaron las fuentes. En el vehículo había también varios juegos de falsas matrículas de coche, precisaron las fuentes.

En el apartamento de Limoges, muy poco amueblado y con sacos de dormir lo que apunta que servía de refugio y lugar de paso, la policía halló teléfonos móviles, algo de dinero en efectivo, cartuchos de 9 milímetros y ejemplares de las revistas internas de ETA, como Zuzen y Zutabe. Por otra parte, el apartamento de Poitiers (oeste) localizado por la policía gracias a la documentación hallada en la furgoneta de Elorrieta y Gárate estaba vacío.

 
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