Dos tiroteos consecutivos en Valladolid se saldan con cinco heridos

Cinco personas resultaron heridas, dos de ellas muy graves, y tres fueron detenidas, como consecuencia de un tiroteo ocurrido en el barrio de Pajarillos de Valladolid, que supuestamente se desencadenó por desavenencias entre familias de una pareja de menores de etnia gitana.

Fue una llamada telefónica la que alertó al 091 de que se habían escuchado varios disparos en la confluencia de las calles Salud y Faisán de la ciudad, hasta donde se desplazaron varias dotaciones policiales, que recogieron numerosos casquillos de bala y un proyectil, informaron fuentes del Cuerpo Nacional de Policía.

A causa del tiroteo, resultaron heridos cuatro miembros de la familia apodada "Los Monchines" y una quinta persona que al parecer no tiene vinculación familiar con el resto.

El subdelegado del Gobierno en Valladolid, Cecilio Vadillo, explicó que, al parecer, y según las primeras investigaciones practicadas, se produjeron tres tiroteos en el barrio, el primero de ellos sobre las 15,00 horas, que comenzó cuando M.J.G., supuesto autor de los disparos, se encontraba en el mercadillo de la calle Faisán.

NAVAJAS Y ARMAS DE FUEGO

Vio acercarse a varias personas con navajas, al parecer miembros de la familia de su esposa, que está embarazada, por lo èl sacó dos armas de fuego que llevaba y les disparó.

Inmediatamente despuès se dirigió a su domicilio, ubicado en el número 31 de la calle Angel García, y alertó a su familia de que estuviera preparada porque podían ir por ellos, por lo que cargaron las armas y, de manera accidental, se les escapó un disparo que no tuvo más consecuencias, precisó Vallejo, con las reservas que implican los resultados de las primeras averiguaciones.

Fue en esos momentos cuando se supone que algún familiar de la mujer en proceso de separación pudo disparar hacia la casa y se dio a la fuga. En el domicilio de la calle Angel García, M.J.G. se confesó autor de los disparos y entregó las armas, en concreto dos pistolas y tres escopetas.

DISPAROS EQUIVOCADOS

Horas despuès, varias personas que se desplazaban en un vehículo y que supuestamente pertenecían a la familia que resultó herida de bala, a su vez allegados de la mujer del detenido, dispararon hacia una vivienda de la calle Golondrina, tambièn en el barrio de Pajarillos, aunque se supone que de manera equivocada porque allí no residían familiares del esposo, precisaron dichas fuentes.

La causa de que el hombre que disparó y despuès fue detenido portase dos pistolas pudo deberse a que las familias de la pareja habían hablado con un patriarca gitano -mediador en conflictos entre familias de esta etnia- que había alertado al joven de que había sido agredido, motivo por el que se armó, ante el temor de que le ocurriera algo.

Vadillo insistió en que por el momento estas son las hipótesis que se barajan sobre lo sucedido, aunque habrá que esperar al resultado de las investigaciones para confirmar o no todos estos extremos.

Además del joven de 20 años M.J.G. los policías detuvieron a su hermano, M.J.G., y al padre de ambos, C.J.J., por su supuesta implicación en los hechos, precisaron fuentes policiales.

UN HERIDO MUY GRAVE

En el Hospital Clínico Universitario permanecen ingresados los heridos de bala en el tiroteo ocurrido entre las calle Salud con Faisán a primera hora de la tarde, todos ellos varones.

De los lesionados, D.L.R., de 17 años, se encuentra muy grave, en la UVI, con dos orificios de bala en el cuello y el muslo, mientras que R.R.L., de 32 años, al que los facultativos han extirpado un riñón, tambièn permanece en estado grave, con dos impactos de bala en el abdomen.

M.R.M., de 29 años, sufrió un tiro lateral en el cuello; un joven de 16 años presenta lesiones en el codo y hombro derechos y la quinta persona herida, al parecer un transeúnte, resultó herido leve en un pie.

Varios comercios situados en la calle Faisán presentan impactos en cristales y paredes, al parecer procedentes del tiroteo, suceso tras el que los vecinos trataron de recuperar la normalidad sin ocultar la impresión por lo ocurrido.