Frida Kahlo es la gran pintora de México 50 años después de su muerte
Tras una vida de tormento físico en compañía de Diego Rivera, Kahlo es hoy una cotizadísima artista
La pintora mexicana Frida Kahlo, de cuya muerte se cumplen hoy 50 años, está más viva que nunca. Se ha convertido en un mito y en la artista más cotizada de América latina, y también -con el tiempo como aliado- en la pintora más valorada, más incluso que el que fuera su marido, el también pintor Diego Rivera.
Frida nació en Coyoacán, en el sur de Ciudad de México. A los 16 años, cuando era estudiante resultó gravemente herida en un accidente de camión y -tumbada en la cama- comenzó a pintar mientras intentaba recuperarse. Tres años más tarde conoció a Diego Rivera, con quien se casó en 1929.
Expuso en tres ocasiones. Organizó las exposiciones de Nueva York de 1938 y de París de 1939 a través de sus contactos con el poeta y ensayista surrealista francés André Breton. En abril de 1953 expuso por primera vez en la galería de Arte Contemporáneo de Ciudad de México.
'FRIDOMANÍA'
Desde meses atrás y con intensidad creciente, dentro y fuera de México se han multiplicado los homenajes a la artista de pobladas cejas y vestimenta folclórica cuya vida estuvo marcada por padecimientos físicos, su matrimonio con el célebre muralista Diego Rivera y su militancia comunista.
En la actualidad, después de haber dado lugar a un sinfín de libros y varias películas y de convertirse en un icono popular, cuesta imaginar que durante 25 años después de su muerte en su natal Ciudad de México, su nombre pasó al olvido.
LA MUJER DE DIEGO
Frida era tan sólo la mujer del muralista Diego Rivera y se suponía que había pintado tres o cuatro cuadros de los 200 que se conocen en la actualidad. Su mérito fue el de haberse volcado en una pintura autobiográfica, en la que plasmó sus sufrimientos, cuando lo que estaba de moda era el muralismo.
Kahlo, que supuestamente tuvo amoríos con hombres y mujeres estando casada con Rivera, cargó desde muy niña con las secuelas de una poliomielitis que le ocasionó una cojera, tras lo cual sufrió un accidente de autobús que la dejó postrada por largo tiempo y desató su pasión por la pintura.
Martha Zamora, biógrafa de Kahlo, ha contado que por su militancia de izquierda, la cultura oficial de México la condenó a una especie de "muerte civil" desde el 13 de julio de 1954, cuando en su funeral su ataúd fue cubierto con la bandera del Partido Comunista al tiempo que los presentes entonaban La Internacional.
HOMENAJES Y EXPOSICIONES
Los homenajes por el 50º aniversario de su muerte incluyen exposiciones de sus obras -entre las que destacan sus dramáticos autorretratos-, las típicas ofrendas a muertos mexicanas y, por primera vez, una biografía escrita por su familia paterna.
Sin embargo, más allá de los homenajes por el aniversario de su muerte, que ocurrió en 1954 por neumonía cuando tenía 47 años, la Casa Azul, actual museo y donde la artista nació y murió, es un punto constante de atracción para los habitantes de Ciudad de México y los turistas extranjeros.




