Siete imputados en Paraguay por el incendio que causó 450 muertos
Entre los imputados de "homicidio doloso" se encuentra el dueño del hipermercado y su hijo
La Justicia paraguaya puso en marcha hoy los mecanismos procesales para deslindar responsabilidades por la muerte de centenares de personas en el incendio que el domingo arrasó un hipermercado de Asunción. El Ministerio Público imputó a los dos propietarios y a cinco guardias del centro comercial por el delito de "homicidio doloso". En su último balance cifra el número de fallecidos en 450.
Las víctimas mortales se elevan a 450, según informaron las autoridades, mientras cobra fuerza la versión de que las puertas fueron cerradas durante el incidente para evitar robos.
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La fiscalía paraguaya informó además de que 139 personas fueron dadas por desaparecidas y otros 451 heridos colapsaban los hospitales de la ciudad.
Testigos y decenas de supervivientes declararon a las autoridades que los guardias clausuraron la puerta del local en medio del pánico y la confusión, para impedir actos de pillaje o que los clientes salieran sin pagar.
De esos testimonio se ha valido la Fiscalía para imputar al dueño del establecimiento, Juan Pío Paiva, a su hijo Daniel, y a otros cinco empleados por "homicidio doloso", según explicó el fiscal Edgar Sánchez.
"HUBO GENTE QUE DIO ORDEN Y GENTE QUE CUMPLIÓ ESA ORDEN"
"Tenemos testimonios directos de personas que sobrevivieron al fuego, hay gente que dio orden y gente que cumplió esa orden", indicó Sánchez, al referirse a los fundamentos de la acusación formulada por la Fiscalía, que deberá ser confirmada en el espacio de cuatro meses.
El empresario volvió hoy a negar su responsabilidad en el siniestro y aseguró que no le "consta" que se ordenara el cierre de las puertas para impedir la salida de la gente que huía del fuego.
Paiva indicó que aquellos que lograron llegar a los accesos no pudieron salir porque "hay cuatro puertas de vidrios blindados". "Lo que pasa es que para abrirse se hace hacia adentro y la gente atrapada empujó hacia afuera", agregó.
Entretanto, el Gobierno de Nicanor Duarte declaró el estado de emergencia sanitaria para canalizar la asistencia a los heridos y coordinar la ayuda humanitaria internacional proveniente de países de la región como Argentina, Brasil, Uruguay y Chile y de otros como España.
En las últimas horas aterrizaron aviones provenientes de esos países con medicinas, instrumentos médicos y expertos en este tipo de catástrofes para colaborar con las autoridades locales en la asistencia a los heridos y la identificación de los muertos.




