El hijo del industrial secuestrado afirma que "creía que iba a morir"
Los análisis realizados detectan cuatro tipos de droga en sangre
Sevan Ramian, el hijo de un industrial norteamericano que permaneció cuatro días secuestrado en un piso de Girona atado a un radiador de calefacción, ha explicado que "creía que iba a morir, les pagaran el rescate o no, porque ellos sabían que conocía sus caras".
Visiblemente afectado, con heridas en las manos y un fuerte golpe en el tabique nasal, Ramian ha explicado, tras haber recibido hoy el alta médica, que durante los cuatro días en que permaneció secuestrado "nadie me ha dado comida ni agua, sólo vi a dos personas y grité para pedir ayuda pero nadie me oyó".
"Me dejaron en el suelo, sobre mi sangre y mi orina, me taparon los ojos y no vi la luz del día", asegura el joven que fue liberado ayer después de que la Policía Nacional consiguiera localizar y detener a sus dos presuntos secuestradores, Driss B. y Youssef B., que anteriormente habían trabajado en una de las empresas propiedad de su padre.
CUATRO TIPOS DE DROGA
Ramian asegura que los análisis de sangre que le han realizado en el hospital Josep Trueta de Girona han detectado "cuatro tipos diferentes de droga", lo que unido a las condiciones infrahumanas en que vivió provocó que sufriera alucinaciones.
Durante el secuestro, Ramian contactó con su padre por telèfono y le contó que estaba secuestrado por varias personas que hablaban con acento extranjero y que para liberarlo le exigían el pago de 100.000 euros.
EL DISPOSITIVO
Las investigaciones policiales permitieron localizar en unos aparcamientos de Girona un vehículo que la víctima utilizaba habitualmente, por lo que se montó un dispositivo de control en la zona, que posteriormente sorprendió a los dos secuestradores.
A unos 60 metros de este aparcamiento se encontraba el domicilio en el que permanecía retenido Ramian, al que la policía procedió a liberar.
Posteriormente, el joven ha permanecido dos días ingresado en el hospital Josep Trueta de Girona donde ha sido atendido de las múltiples contusiones que presentaba y del impacto psicológico que le había causado el secuestro.




