Una pareja saca a sus hijos por la fuerza de un centro de acogida

La policía busca a un matrimonio que ayer se llevó por la fuerza a sus tres hijos, de 7, 3 y 1 año, de un centro de acogida de Cáceres tras herir a un guardia de seguridad, informó el director general de Infancia y Familia de la Junta de Extremadura, Javier Alonso de la Torre.

El suceso, según publica hoy "El Periódico Extremadura", tuvo lugar sobre las 12:30 horas de ayer cuando los padres acudieron a una de las visitas mensuales y vigiladas a las que tienen derecho y decidieron llevarse por la fuerza a sus hijos, dos niños y una niña, tras agredir con una cadena al vigilante que trató de frenarlos.

El director general de Infancia y Familia confirmó que continúa en marcha el dispositivo de seguridad montado por la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Policía Local para localizar al matrimonio, a quien los técnicos habían retirado la tutela de sus hijos por considerar que la familia no reunía las condiciones mínimas para poder atender correctamente a los menores.

Alonso de la Torre indicó que el guardia de seguridad herido en el incidente, con el que ha hablado esta mañana, se encuentra bien a pesar de las contusiones que le ocasionó el padre, de las que fue atendido en urgencias del Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres, y recibió el alta a primera hora de la tarde.

Los tres menores, según Alonso de la Torre, estaban tutelados por la Junta de Extremadura desde hacía unos dos meses, cuando fueron trasladados a esta comunidad autónoma procedentes de Cataluña, donde estaban bajo la tutela de la Generalitat.

Los niños fueron acogidos en el centro de menores Julián Murillo de Cáceres el 24 de junio, donde se habían adaptado bien, y ya habían recibido una visita anterior de su madre, cuya familia está vinculada a la localidad cacereña de Mohedas de Granadilla.

Según el director general, ayer era la primera visita que el padre hacía a los niños en Cáceres y se desarrolló, como es habitual en estos casos, con la presencia de un guardia de seguridad, que vigila, pero que procura no interferir en el encuentro.

En ese sentido, explicó que el acceso al centro está perfectamente controlado, tanto en la entrada como en la salida, y reiteró que los padres están autorizados a visitar una vez al mes a sus hijos para no romper el vínculo familiar.

Alonso de la Torre destacó que el personal del centro actuó correctamente, ya que, "ante la primera reacción de la madre de salir con los niños y antes incluso de que el guardia de seguridad fuera agredido, ya estaba el director llamando a la policía".

Insistió en que "la reacción fue inmediata" y consideró que no se pueden tener más medidas de seguridad en un centro de acogida de menores.

Por otra parte, el director general de Infancia y Familia indicó que los padres ya habían llevado a cabo acciones administrativas ante la Generalitat catalana para recuperar la custodia de sus hijos, si bien todavía no lo habían intentado con la Junta de Extremadura.

Alonso de la Torre especificó que la Administración extremeña ha puesto en conocimiento de las fuerzas del orden todos datos de los de que disponen en torno a los menores para facilitar su localización.