El "David" de Miguel Angel cumple quinientos años
La estatua fue colocada en 1504 frente al palacio de la Signoria en Florencia
El "David" de Miguel Angel, una de las esculturas más famosas y admiradas del mundo, cumple hoy quinientos años con su piel de mármol más reluciente que nunca, tras la restauración a que ha sido sometida para tan señalada fecha.
El 8 de septiembre de 1504, la gigantesca estatua del pastor de la casa de Israel, de 5,16 metros de altura y 5,5 toneladas de peso, quedaba ubicada con toda solemnidad delante del palacio de la Signoria, símbolo del poder de Florencia.
No hay noticia de particulares celebraciones, pero el hecho de que fuera emplazada en un lugar tan señalado -elegido por una comisión de la que formaban parte Leonardo Da Vinci y Sandro Botticelli- demuestra la importancia que se quiso otorgar a la obra. Michelangelo Buonarroti (1475-1564) tenía entonces 23 años y había comenzado a trabajar con un enorme bloque de mármol tres años antes, en agosto de 1501, por encargo del Gobierno de Florencia para simbolizar el poder y la libertad de aquella República.
BLOQUE DE MARMOL DEFECTUOSO
El bloque de mármol del que salió el "David" estaba lleno de defectos, hasta el punto de que había sido desechado por dos conocidos artistas de la època, Agostino di Duccio y Antonio Rosellino. Pero el genio del Renacimiento obró el milagro y luego dejó una frase para la ocasión: "Como David ha defendido a su pueblo, así quien gobierna Florencia debe justamente defenderla y gobernarla con justicia".
La celebración del quinto centenario de la que con el tiempo se convertiría en icono del arte universal servirá para recordar las crónicas que anunciaron su llegada al mundo de los mortales de sus coetáneos Vasari y Landucci. Lo hará la actriz Lucia Poli, en un acto en el viejo
palacio de la Segnoria al que asistirá el ministro italiano de Cultura, Giuliano Urbani, que luego se sumará en la Galería de la Academia florentina, donde hoy se conserva la estatua, a un concierto en honor de Miguel Angel.
Con estos homenajes comienza una serie de celebraciones que incluyen debates, congresos y una peculiar exposición en torno al "David", que ya ha comenzado a dar que hablar, de obras de escultores contemporáneos, como George Baselitz, Luciano Fabro, Jannis Kounellis y Robert Morris, y del fotógrafo Thomas Struth.




