La Generalitat catalana paga 41.650 euros a la familia de un preso que se suicidó
El fallecido estaba internado en La Modelo como preso preventivo
La Generalitat deberá indemnizar con 41.650 euros a la mujer y a los dos hijos de un recluso que se suicidó al ahorcarse en los lavabos del departamento de psiquiatría de la cárcel Modelo de Barcelona el 13 de septiembre de 1995.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) considera que la madrugada de su muerte el interno "no estaba sometido a vigilancia" o, como mínimo, "ese control era insuficiente", dado que se trataba de un enfermo con síndrome paranoico depresivo ingresado en el departamento de psiquiatría y con antecedentes de intento de suicidio.
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El fallecido, de 38 años, estaba internado en La Modelo como preso preventivo desde hacía siete meses como presunto autor de un delito de tráfico de drogas y, desde su llegada al centro, estuvo sometido a tratamiento farmacológico debido a sus problemas psíquicos.
Con estos antecedentes, la mujer del recluso decidió tras su muerte pedir una indemnización de 25 millones de pesetas de las de 1995 (150.253 euros) a Instituciones Penitenciarias, al entender que éstas deben velar por la seguridad personal y la vida de los internos.
El Departamento de Justicia denegó la petición y la viuda recurrió entonces ante el TSJC. Ahora la Sección Primera de lo Contencioso Administrativo le ha dado la razón, aunque estimando la compensación económica en cerca de siete millones de pesetas (41.650 euros)
El fallo recuerda que, la misma noche de autos, el preso ya había manifestado a otro interno "su deseo de acabar con su existencia" y había provocado la intervención de los servicios de vigilancia "al protagonizar una falsa alarma de suicidio".
