La incertidumbre eleva el crudo 'brent' a un máximo de 47,60 dólares

Madrid

No hay nada que calme el mercado del petróleo, que continúa su escalada imparable ajeno a los anuncios de incremento de producción. La incertidumbre alimenta los precios, que siguen en zona de máximos, esperando señales como la cifra de reservas que hoy difundirá el Departamento de Energía de EE UU y que pueden decidir el rumbo futuro del coste del barril de crudo, que vuelve a marcar máximos de 47,60 dólares en Londres y de 51,48 en Nueva York.

El precio del crudo de Texas vuelve a superar hoy los 51 dólares porque la mayoría de los expertos esperan un nuevo descenso en las reservas estadounidenses. El west Texas ha marcado hoy un pico máximo de 51,48 dólares, su nivel récord en los 21 años que lleva cotizando este producto en el mercado neoyorquino. En cuanto al tipo brent, registra igualmente precios que renuevan máximos en el mercado de Londres. Los contratos para entrega en noviembre alcanzaron esta mañana los 47,60 dólares tras cerrar anoche a 47,13 dólares por barril.

En la fuerte escalada alcista del precio del petróleo, tanto en Londres como en Nueva York, hay un gran componente de preocupación por el ajustado nivel de oferta frente a la demanda. Se teme a las interrupciones en el suministro, máxime cuando la actividad petrolera en el golfo de México todavía no se ha recuperado de los efectos devastadores del huracán Iván. A todo esto se unen los asuntos que llevan meses "preocupando" a los inversores: Irak, la petrolera rusa Yukos y el miedo a atentados terroristas.

Pero un sector del mercado empieza a preguntarse hasta qué punto el encarecimiento del crudo se debe a movimientos especulativos que aprovechan determinadas situaciones para hacer caja a costa del miedo ajeno. Siempre ha habido "tensión geopolítica" alrededor de los principales países productores de petróleo, con guerras incluídas, y nunca se habían visto encarecimientos del petróleo tan fuertes y, sobre todo, tan duraderos. Aunque, llegados a este punto, lo que realmente importa no es la causa, sino el efecto sobre las principales economías mundiales, inmersas en un lento y delicado proceso de recuperación que puede verse más que truncado por la excesiva dependencia de un petróleo que cada vez cuesta más.

La OPEP también ha comunicado hoy un nuevo récord del barril de petróleo que comercializa, precio que calcula en base a siete tipos diferentes de calidades de crudo. Alcanzó 43,80 dólares por barril, batiendo así su anterior máximo de 43,54 dólares registrado el 28 de septiembre.