Moratinos y Mohamed VI abordan en Tánger el conflicto del Sáhara
Prepararon la visita que los reyes de España realizarán a Marruecos en enero de 20050
Los preparativos de la visita de Estado que los reyes de España realizarán a Marruecos en enero de 2005, y el contencioso del Sahara Occidental polarizaron la entrevista que celebraron hoy en Tánger el rey Mohamed VI y el ministro español de Exteriores, Miguel Angel Moratinos.
Al término de la audiencia real, que se celebró en la residencia del rey Mohamed VI en Tánger, Moratinos declaró que todavía no hay fechas concretas para el viaje oficial a Marruecos de los reyes de España en enero próximo, pero anunció que como es habitual en las visitas de Estado tendrá una duración de tres días.
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Moratinos recordó que la única visita de Estado realizada hasta la fecha por los reyes de España a Marruecos se produjo en 1979, y consideró que el viaje real marcará "el relanzamiento" de las relaciones entre los dos países.
"Esta visita será la que marque las relaciones estratégicas entre nuestros dos países que quieren compartir un futuro común" declaró el jefe de la diplomacia española.
SOLUCIÓN AL CONTENCIOSO DEL SÁHARA
Señaló también que el rey Mohamed VI le había hecho varias propuestas sobre la visita, pero precisó que tenía que comunicárselas a la Casa Real española antes de poder hacerlas públicas.
Respecto al conflicto del Sahara, Moratinos dijo que había venido a Marruecos con el ánimo de "aportar ideas" y de explicar a las autoridades de ese país la intensa agenda española "para buscar vías de solución al contencioso".
El ministro añadió que la diplomacia española está trabajando con todas las partes afectadas y con otros países como Francia y Estados Unidos para que el Consejo de Seguridad de la ONU apruebe a finales del presente mes una "solución positiva".
EL PAPEL DE LA ONU
En opinión de Moratinos , dicha resolución debía otorgar al representante especial de la ONU para el Sahara Occidental, el peruano Alvaro de Soto, la suficiente capacidad de maniobra para lograr un acercamiento entre las partes que permita "aplicar el plan Baker".
Consideró que este objetivo no va a ser fácil porque algunas partes quieren una resolución "más técnica" que permita a la ONU tener una "mayor influencia" en la solución del conflicto.
Moratinos recalcó que el objetivo de España es lograr un consenso entre las partes" y explicó que "seguimos manteniendo la posición tradicional española en este punto".
