Inauguran en Barcelona el primer museo español sobre la inmigración
El centro está ubicado en una casa colonial en la que la Diputación ha invertido 600.000 euros
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pascual Maragall, ha inaugurado hoy en Sant Adriá, en Barcelona, el Museo de Historia de la Inmigración en Cataluña (MhiC), el primero de estas características existente en España. En el discurso inaugural, Maragall ha recordado que "la fuerza de Cataluña es el respeto que se tienen mutuamente todos aquellos que vivimos en este país, respeto de los catalanes hacia los que llegan y respeto de éstos hacia los que están aquí".
El alcalde de Sant Adriá, por su parte, ha asegurado "este museo es un ejercicio de justicia hacia la ciudadanía por recuperar su pasado y es una apuesta meritoria e innovadora por ser el primero que se inaugura en España", ha argumentado Canga. Ha añadido que "el hecho migratorio no es un fenómeno del pasado", sino del presente y del futuro, sólo que "ahora los inmigrantes tienen otro origen, de África, Sudamérica y Asia, si bien el objetivo es el mismo, la búsqueda de nuevas y mejores oportunidades".
El museo de Sant Adriá se centra sobre todo en la inmigración del siglo XX, cuando entre los años 40 y 70 llegaron a Cataluña un millón y medio de personas procedentes de todas las regiones de España, principalmente de Andalucía y Extremadura. En esos años, Sant Adriá y el resto de ciudades de los alrededores de Barcelona se construyeron a golpe de trabajo de los recién llegados, por lo que el objetivo del museo es recuperar la documentación existente sobre esa época para dar una visión de este fenómeno demográfico y social.
De este tema trata la exposición "De inmigrantes a ciudadanos" que también se ha inaugurado hoy, en la que a través de fotografías, documentales, materiales y objetos de la época se puede hacer un repaso a la inmigración del siglo XX. El museo está ubicado en una casa colonial construida a finales del siglo XVIII, conocida como Can Serra, en la que el ayuntamiento de Sant Adriá y la Diputación de Barcelona han invertido más de 600.000 euros en los trabajos de rehabilitación.




