Intenso homenaje a Sábato en la clausura del III Congreso de la Lengua
El Cervantes llama a "asegurar la diversidad y unidad" del español para que no sea "la lengua de muchos, pero la lengua de nadie"
El III Congreso Internacional de la Lengua Española que se celebra estos días en la ciudad argentina de Rosario fue clausurado este sábado con un emotivo homenaje al escritor argentino Ernesto Sábato que, ante la ovación que le dedicó el público, no pudo contener las lágrimas al recibir una distinción de la Real Academia Española por su extensa trayectoria.
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Durante la cuarta y última jornada del Congreso, que se celebró en el Teatro 'El Círculo' de Rosario, el autor de célebres novelas como 'El Túnel' y 'Sobre héroes y tumbas' fue homenajeado por la RAE por su trayectoria y recibió una distinción entregada por la senadora y presidenta honoraria del Congreso, Cristina Fernández de Kirchner, esposa del presidente argentino, Nèstor Kirchner.
Sábato, de 93 años, fue recibido por un auditorio que lo aplaudió de pie y que desbordó las instalaciones del Teatro El Círculo. Ante tanta ovación, el escritor no pudo contener las lágrimas, se puso de pie y agradeció con gesto emocionado, según informa la prensa local.
El escritor portugués José Saramago, designado para recordar la trayectoria de su colega argentino, dijo haberse topado por primera vez con 'El Túnel' en "las postrimerías de los años 50, en un desaparecido café de Lisboa, donde me reunía con amigos para hablar de libros en voz alta, y de política en voz baja".
El premio Nobel de Literatura llamó a Sábato "mi hermano mayor", y resaltó su "implacable creencia en la razón". "Entre el temor y el temblor en que nuestras vidas discurren, la tuya no podía ser una excepción. Alguien, que siendo tan humano, se niega a absolver su propia historia. Alguien que, asimismo, no se perdonará nunca su condición de hombre", señaló.
CONCLUSIONES
Horas antes, el secretario general del III Congreso Internacional de la Lengua Española y director acadèmico del Instituto Cervantes, Jorge Urrutia, exhortó a "asegurar la diversidad y la unidad" del idioma español, para que no sea "la lengua de muchos, pero la lengua de nadie".
Urrutia evaluó el desarrollo de las distintas mesas redondas y paneles que se extendieron durante los tres primeros días del encuentro, y concluyó que "la globalización ha despertado nuevas inquietudes", entre ellas "un serio interés por la lingüística".
"Las grandes lenguas internacionales, entre ellas de modo importante el español, llevan en la gloria de su extensión geográfica la enfermedad de su empobrecimiento", señaló Urrutia, quien advirtió de que "la palabra tiene que ser necesariamente comunicativa".
Así, destacó que "la generalización de los idiomas conduce a la anulación de las diferencias, a su neutralización, con el peligro de convertirse así en la lengua de todas partes, pero también en la lengua de ninguna".
El Congreso, que no emitió conclusiones a pesar de que el programa señalaba que los coordinadores de las tres áreas de trabajo iban a presentarlas en la última sesión, también será recordado por algunas actividades paralelas que no formaban parte de las sesiones de trabajo: la presentación del Diccionario Panhispánico de Dudas y el lanzamiento de la nueva edición del Quijote.




