Internacional

Los países asiáticos establecerán un sistema de prevención de desastres

Será una de las medidas que se tomarán en la conferencia de donantes el jueves en Yakarta

El presidente de Indonesia, Susilo Bambang Yudhoyono, anunció hoy que la región establecerá un sistema de prevención de desastres, cuando la cifra de muertos por el maremoto en este país supera ya los 94.000. "Indonesia y otros países vecinos planean establecer un sistema de alerta para prevenir los desastres naturales, incluidos seísmos y maremotos", dijo Yudhoyono a la prensa en Yakarta.

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Las olas gigantes provocadas por el terremoto de 9,0 grados del pasado 26 de diciembre, cuyo epicentro se localizó en Sumatra, arrasaron las costas de once países bañados por las aguas del Océano Índico y provocaron la muerte de casi 150.000 personas, además de otros miles de desaparecidos. "El objetivo es prevenir pérdidas masivas de vidas humanas y hacer frente a futuros terremotos y desastres naturales", manifestó Yudhoyono.

Se espera que la planificación de este sistema de alerta, que podría ser similar al ya implementado en los países bañados por el Pacífico, se discuta en la conferencia sobre las consecuencias del seísmo que tendrá lugar en Yakarta el próximo jueves. A la cumbre asistirán los mandatarios asiáticos, además del secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, y el secretario norteamericano de Estado, Colin Powell.

El Gobierno indonesio cree que esta reunión extraordinaria permitirá recaudar más ayudas para proteger a los centenares de miles de damnificados. La provincia de Aceh, al norte de la isla indonesia de Sumatra, ha sido la más afectada por el maremoto al ser la más cercana al epicentro del seísmo, el más fuerte de las últimas cuatro décadas. Banda Aceh, la capital provincial, sigue sumida en el caos aunque poco a poco va recuperando la normalidad: el suministro de alimentos es mayor cada día y los negocios y oficinas comienzan a reabrir sus puertas.

Aún así, más de 250.000 personas siguen hacinadas en centros de refugiados, al tiempo que militares y voluntarios siguen con las tareas de recogida de cadáveres.

"Aún quedan unos 30.000 cuerpos por recoger en Banda Aceh y sus cercanías", declaró Agus Salim, funcionario del Ministerio de Información. "Pedimos al Ejército que haga el máximo esfuerzo. Si consiguiesen retirar unos 5.000 cadáveres por día, en una semana se habría acabado", dijo Salim.

Los cuerpos están siendo enterrados en fosas comunes en las afueras de la ciudad, cerca del aeropuerto, para evitar la propagación de epidemias. Por el momento, están siendo enterrados todos los cadáveres, pero no se descarta que algunos de ellos sean incinerados: "Vamos a hacer todo lo posible para no quemar los cuerpos", manifestó el funcionario. En las regiones más remotas, donde todavía se tardará más de una semana en restaurar los accesos por carretera, los supervivientes han empezado a quemar cadáveres porque no tienen medios para enterrarlos.

Gran parte de los 230 kilómetros de la franja costera

noroccidental de Sumatra, entre Banda Aceh y Meulaboh, ha quedado completamente destruida. En algunos casos, como en la población de Calang, que contaba con unos 10.000 habitantes antes del maremoto, más del 70 por ciento de la población ha perecido. El único modo de acceder a estos pueblos costeros, cuyos residentes están incomunicados desde hace ocho días, es en helicóptero, lo que retrasa las tareas de evacuación.

"Hemos entregado diez teléfonos con transmisión por satélite a zonas remotas pero es insuficiente", subrayó Gandi Prayitno, director contable de la compañía de telecomunicaciones indonesia Pacific Satellite Nusantara. "Es necesario hacer todavía más. La gente necesita comunicarse, necesitan encontrar a familiares desaparecidos o superar el trauma que han pasado contándolo a los demás", dijo Prayitno.

Escuche la entrevista con la secretaria de Estado de Cooperación, Leire Pajín