Abbas ordena la detención de los que dispararon contra su oficina
Los asaltantes dijeron ser miembros de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa
El presidente palestino, Mahmud Abbas, ordenó a primera hora de hoy la detención de los militantes que abrieron fuego ayer contra sus dependencias en Ramala (Cisjordania) mientras se encontraba en su interior, según informaron fuentes de seguridad.
Un grupo de quince hombres armados atacó ayer la sede gubernamental antes de provocar daños en varios restaurantes y obligar que cerraran las tiendas de la ciudad, pero sin provocar heridos según testigos y fuentes oficiales.
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En un encuentro con los responsables de la seguridad tras el tiroteo, Abbas, elegido presidente el pasado 9 de enero, ordenó la detención de los militantes, el despliegue de más tropas en la ciudad y el pago de compensaciones a los negocios que resultaron dañados en los incidentes, según las citadas fuentes.
Los asaltantes, que dijeron ser miembros de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa -grupo armado vinculado a Al Fatá-, explicaron que su actuación se debía a que las fuerzas de seguridad palestinas habían expulsado a seis de ellos del cuartel general palestino, donde habían buscado refugio despuès de que Israel comenzara a perseguir y detener a los militantes palestinos tras el inicio de la Intifada. El ex presidente palestino Yasir Arafat permitió a más de 20 fugitivos permanecer en al Mukata y Abbas siguió con esta decisión.
Un responsable de la seguridad palestina, que pidió el anonimato, dijo que las fuerzas de seguridad pidieron a los seis militantes que o entregaban sus armas o abandonaban el recinto tras haberse comprobado su implicación "en secuestros, chantajes y dañar y disparar a personas". "Fueron advertidos varias veces de que debían cesar su conducta y acciones", añadió.
