La policía analiza un teléfono móvil localizado en la librería donde se intentó agredir a Carrillo

Según ha podido saber la Cadena SER, la policía está investigando una prueba localizada en la librería Crisol de Madrid, en la que el pasado sábado, un grupo de 'ultras' trataron de agredir al ex secretario del Partido Comunista, Santiago Carrillo, durante la presentación de un libro del historiador Santos Juliá.

Se trata de un teléfono móvil encontrado dentro de la librería madrileña que pertenece, presuntamente, a uno de los agresores. Después de rastrear el aparato, se han encontrado mensajes cortos de días anteriores a la jornada de los incidentes incitando "a la gresca" y del mismo sábado, jactándose de las agresiones.

A pesar de ello, el juez ha desestimado la prueba aportada por las fuerzas y cuerpos de seguridad porque concluye que "no se puede demostrar ninguna actividad delictiva" del propietario del teléfono, según fuentes judiciales consultadas.

No es demostrable, a criterio del magistrado, que el dueño del móvil haya participado en los intentos de agresión contra Carrillo y los golpes que sí recibieron el historiador Santos Juliá, el ex ministro socialista Claudio Aranzadi y al director general de Crisol, Andrés Galdón.

Sin embargo, la policía va a seguir trabajando en esta línea, al considerarla "clave" para la investigación, ya que demuestra, según su criterio, que los agresores actuaron como un auténtico "comando" organizado.

Por el momento no hay detenidos, aunque sí identificados: se tratan de personas relacionadas con grupos de ultra derecha y de Falange Española, cuyo jefe nacional, Fernando Cantalapiedra, ha rehusado condenar la agresión y asegura que "es una respuesta lógica" a lo que entiende como "provocaciones" del ex dirigente comunista.