Bronca en el Parlamento andaluz por unas pancartas contra Chaves

El Parlamento andaluz ha vivido hoy una enorme 'bronca' durante la sesión de control al gobierno. La causa: unas pancartas contra el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, que los diputados del PP sacaron cuando éste se disponía a iniciar su intervención. Chaves se negó a hablar mientras las pancartas, que tenían la leyenda "Chaves, no más cacicadas, no fuesen retiradas. Los parlamentarios del PP se negaron, por lo que la presidenta de la Cámara, María del Mar Moreno, se vio obligada a suspender el pleno.

Una vez que se había producido la primera intervención de la presidenta del Grupo Popular, Teófila Martínez, en la sesión de control al Gobierno, y cuando se disponía a hablar el presidente de la Junta, Manuel Chaves, los diputados del PP mostraron pancartas con la leyenda "Consejo Audiovisual: Chaves no más cacicadas".

Fruto de esta actitud, el presidente de la Junta advirtió a la presidenta de la Cámara de que no hablaría mientras los diputados no retiraran las pancartas porque, según sus palabras, "esto no es un circo, es un Parlamento donde radica la soberanía nacional. Los diputados populares no hicieron caso a la petición de Chaves, pese a los insistentes requerimientos realizados por Moreno.

Con estas pancartas el PP se refería a que su grupo, con 37 diputados, va a contar con dos representantes en el Consejo Audiovisual -los mismos que IU, con sólo seis diputados-, como consecuencia del "ajuste de cuentas" por "no haber respaldado" el acuerdo sobre el impulso democrático firmado por el resto de grupos, según dijo Teófila Martínez. Manuel Chaves tomó la palabra para afirmar que el Parlamento merece el respeto de todos los diputados "incluidos los del PP", y añadió que nunca en la Cámara habían sido mostradas pancartas con un "insulto personal" al presidente de la Junta de Andalucía.

Oportunas sanciones

La negativa del grupo popular a retirar las pancartas obligó a la presidenta de la Cámara a suspender durante cinco minutos la sesión para convencerles de que no continuaran con esta actitud, puesto que el PP "ya había conseguido el efecto mediático". Pasados los cinco minutos, y en medio de una gran bronca entre los diputados, la presidenta de la Cámara insistió en que los miembros del Grupo Popular debían retirar las pancartas, aunque infructuosamente.

Ante esta situación, María del Mar Moreno se dirigió a los diputados del PP para decirles que había intentado "con amabilidad" pedir la retirada de las pancartas, e incluso les recordó que elartículo 104 del Reglamento de la Cámara prohíbe "verter conceptos ofensivos al decoro de la Cámara". Moreno les advirtió de que si no deponían su actitud se veía obligada a pedirles que abandonaran el pleno para continuar con la sesión, a lo que volvieron a negarse los diputados, por lo que la presidenta tuvo que suspender definitivamente el pleno con la advertencia de que tendrían las "oportunas sanciones".