Chirac cae a los índices más bajos de popularidad desde su llegada al Elíseo
Villepin confirma el cargo de Sarkozy como nuevo ministro de Interior
Sólo dos de cada diez franceses respaldan al Presidente de la República, la cota mas baja en su diez años en el Palacio del Elíseo, según el sondeo de popularidad mas prestigioso del país: el que publica el instituto SOFRES para `Le Figaro Magazine?, el suplemento del fin de semana del diario conservador. Por su parte, el primer ministro Villepin ha confirmado hoy un Gobierno que no presenta más novedad que la incorporación como 'número dos' de Sarkozy.
Chirac registra un 24% de respaldo en una encuesta realizada tras el rechazo de la Constitución Europea en el referéndum del domingo.
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Entre tanto, los franceses siguen pendientes de su nuevo primer ministro que no acaba de conformar su gobierno. Condicionado por su número dos, Nicolás Sarkozy, Dominique de Villepin multiplica las consultas y los gestos.
Esta tarde, ha realizado su primera salida simbólica para visitar una oficina de empleo en la periferia de París. La lucha contra el paro es su principal objetivo, según declaró anoche en su primera entrevista a la televisión privada TF1.
Otro sondeo que esta tarde publica el diario `Le Monde? señala que solo el 36% de los franceses respaldan a Villepin frente a un 56% que apoyan a Sarkozy, que esta noche, a su vez, se explicará en el telediario de máxima audiencia. Según la misma encuesta, los franceses se muestran divididos sobre si ambos políticos serán capaces de entenderse.
Por su parte, el primer ministro de Francia ha confirmado hoy el nuevo gobierno, más reducido, que mantiene los equilibrios entre sus dos jefes: Villepin y Sarkozy, pero que aporta pocas caras nuevas. De hecho, la mayoría de los ministros de Raffarin se mantienen o cambian de cartera. Es el caso de Michelle Alliot-Marie, que sigue en Defensa, de Thierry Breton, que hace 100 días que ocupa el ministerio de Economía, y el de Trabajo, Jean Louis Borloo, artesano del impulso social que quiere Chirac.
La prestigiosa cartera de Asuntos Exteriores es para Philippe Douste-Blazy, que ha pasado por Sanidad con el mayor índice de contestación interna a sus reformas. Otro contestado el titular de Justicia, Dominique Perben, cambia a Transportes, cuyo titular hasta ahora, el único centrista del gobierno: Gilles de Robien, que pasa a Educación.
Precisamente, los grandes sacrificados son el jefe de la diplomacia, Michel Barnier, y el titular de Educación, cuya reforma ha tenido una importante contestación en la calle. Su resistencia a abandonar el ejecutivo y el respaldo de Sarkozy, habrían retrasado esta nuevo gobierno que mas parece una remodelación del anterior. El portavoz, por ejemplo, continúa siendo el mismo: Jean François Copé.
