Un videojuego simula las sensaciones de conducir bajo los efectos de la cocaína
Una empresa especializada en tratamientos contra la adicción permite descargar el juego desde su página web
Madrid
Sonido, movimiento y mejor juego. Esas son las sensaciones de conducir bajo los efectos de la cocaína según el videojuego Virtual Drug Use. Pero después de este primer "subidón", los efectos desaparecen. Entonces, el jugador tiene que dejar de conducir para esnifar otra dosis.
Más información
La situación se repite. La tolerancia al tóxico cada vez es mayor y los éxtasis más cortos. Progresivamente, el jugador dedica más minutos a obtener la droga y menos a conducir. Tras una serie de repeticiones, queda claro que la cocaína crea una limitación que frustra cualquier esfuerzo de jugar de forma competitiva. Ésa es la conclusión que la empresa española TAVAD, especializada en tratamientos contra la adicción, quiere que el jugador, y especialmente la población joven, obtenga.
Porque el consumo de cocaína se ha duplicado en los últimos diez años hasta llegar al 7% en la población joven, según las cifras que baraja el Ministerio de Sanidad. Un porcentaje nada despreciable que apunta el fracaso de los planes de prevención escolar. 144.000 jóvenes esnifaron esta droga el año pasado. Por eso, TAVAD busca un anzuelo con el que atrapar la atención de los jóvenes. Su propuesta es "este videojuego, un soporte ideal porque es un registro conocido por ellos y compartido en su entorno", explica el portavoz de la empresa, Alejandro Leiva.
Se trata de un programa gratuito que funciona a partir de "flash" y puede descargarse en la página www.tavad.com. La pantalla muestra una carrera de motos y un indicador informa sobre la cantidad de droga que está afectando al cerebro durante la carrera.
Sin embargo, la finalidad con la que se ha creado este software no es que los niños jueguen sin entender nada, con el peligro de que asocien la actividad lúdica con las drogas. Desde TAVAD recuerdan responsabilidad paterna a la hora de educar en prevención.