Aguirre matiza su promesa de reducir las listas de espera quirúrgica

La promesa tenía matiz. Cuando la presidenta regional de la Comunidad de Madrid, la 'popular' Esperanza Aguirre, comprometió su mandato a la reducción del tiempo de espera en las listas quirúrgicas no dijo que este tiempo comenzaría a contar en el momento de estar preparado para ser intervenido y no cuando el centro médico indique la necesidad de ser operado.

En la lista de espera quirúrgica se entra cuando el último facultativo de la cadena médica lo considere oportuno y se esté completamente preparado para ser intervenido, y no cuando en el centro médico se considere la necesidad de ser operado.

Esta importante precisión, que se traduce en que se gana tiempo, es un importante matiz sobre el compromiso de la presidenta regional que dijo que dimitiría si no reducía a 30 días esas listas. Ayer, en la Asamblea Regional, Aguirre hizo esta matización para salir de las críticas que desde la oposición y los sindicatos se ha realizado al desarrollo de esta reducción de espera.

Tras este anuncio han sido pocos los que se han sorprendido por el cambio. La 'Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública', por ejemplo, cree que "era de esperar que el compromiso de Aguirre era imposible de cumplir desde su planteamiento" y que ahora "se amplía todavía más el maquillaje de cifras" porque se podrá dilatar el proceso pre-operatorio hasta cuadrar los tiempos a lo que convenga, según su presidente Marciano Sánchez Baile.

Los sindicatos van por la misma línea. "No es un mero matiz, dicen, sino un cambio estratégico de raíz", según Jaime Cedrún, secretario de política institucional de Comisiones Obreras.

Desde la oposición, el secretario general del PSOE madrileño, Rafael Simancas tachaba el cambio de "tomadura de pelo y una falta de respeto a los miles de ciudadanos que esperan con dolor y angustia a ser atendidos en la sanidad madrileña" e Izquierda Unida dice que es "un paso hacia lo imposible", según la opinión de la diputada Caridad García.