Amplia muestra de la áspera pintura de Antonio Saura en el Reina Sofía

El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía ha inaugurado hoy una exposición con 61 obras de Antonio Saura (Huesca, 1930 - Cuenca, 1998) que ha incorporado a su colección al ser entregadas en 2001 por las herederas del pintor como parte del pago al Estado de los impuestos de sucesión. La pinacoteca incorpora así estos 38 dibujos y 23 pinturas a las 11 obras que tenía ya de este artista, y aprovecha para exponerlas hasta el próximo 10 de octubre.

La directora del museo, Ana Martínez de Aguilar, ha elogiado la figura "universal" de Saura, un artista que "dio lo mejor de sí mismo" y que se caracterizó por su "riqueza, versatilidad y cantidad de registros". Además, ha agradecido la dación realizada por la familia, "un ejemplo de actuación", y el hecho de que el Ministerio de Hacienda, a quién se entregaron las obras como pago por los impuestos, se las cediera a su vez al centro madrileño.

Marina Saura, hija del pintor, ha mostrado por su parte su "enorme alegría" ante esta exposición (presentada bajo el título Itinerarios de Antonio Saura), y ha señalado que fue su propio padre el que eligió las obras entregadas al Reina Sofía como "referente" de su trayectoria; según su hija, fue el pintor el que abrió la vía para esta dación al mostrarse interesado por esta fórmula.

La colección cedida al museo ilustra según ha dicho las diferentes etapas artísticas de su padre, y permiten una "comprensión cabal" de su trayectoria. Marina Saura ha apuntado que "quizá falte algún cuadro representativo de los 90", y ha dejado abierta la posibilidad a negociar sobre este asunto ("el futuro es muy amplio"); Martínez de Aguilar ha recogido el guante, pero ha precisado que será efectivamente en el futuro, porque ahora el museo se encuentra en plena "reflexión sobre la colección".

Itinerarios comprende un recorrido desde los inicios surrealista del pintor, que se abre con las Constelaciones de 1948, hasta la última etapa, representada por Cuatro caras, de 1996.