El Consejo de Europa insta a España a prohibir el castigo físico a los niños

Sólo tres de cada 10 niños europeos viven en países que prohíben expresamente el castigo físico en los hogares, según Naciones Unidas, y los españoles no están entre ellos. En la UE sólo diez países penalizan de forma expresa este tipo de castigo a los menores. Para combatir esta situación, 500 expertos internacionales se reunieron la pasada semana en Eslovenia a petición de la ONU y el Consejo de Europa, y se aprobó una declaración en la que se insta a España y al resto de los países a que modifiquen su legislación para prohibir expresamente cualquier tipo de violencia hacia los niños.

El Código Penal español protege a todos los ciudadanos contra la violencia, pero el Código Civil establece que "los padres podrán (…) corregir razonable y moderadamente a los hijos". Esto es considerado ambiguo desde el punto de vista legal por numerosos expertos y organismos internacionales, que estiman que se trata de "violencia legalizada".

La opinión de los ciudadanos refleja que la violencia dentro de la familia no es excepcional. El 52% de los españoles justifica dar un bofetón o un azote a su hijo algunas veces, según el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas de marzo de 2004. Las asociaciones y los expertos, en cambio no están de acuerdo con esta visión, consideran que ningún tipo de castigo físico es admisible y piden el cambio legal.