Zapatero no ve posible un pacto estable ahora con CiU
Mas apuesta por que CiU recupere su "papel central" sin renunciar a los "objetivos nacionales"
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sigue sin ver posible un pacto estable de gobernabilidad con los nacionalistas de CIU. Zapatero respondía así al ofrecimiento que el martes le hizo el líder de los Convergentes, quien garantizó al PSOE su disposición a ejercer de "factor de estabilidad, serenidad y moderación" frente al "radicalismo" y la "bronca" de PP y ERC.
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Desde Roma, donde ha celebrado una cumbre bilateral junto al primer ministro italiano Silvio Berlusconi, Rodríguez Zapatero ha señalado que, "como es conocido" el PSOE tiene una relación "razonable y positiva" con CiU. El presidente de Gobierno ha destacado la "posición de colaboración" de los convergentes con el Ejecutivo, que considera demostrada en el proceso de debate de la LOE.
"Pero, a partir de ahí, creo que cualquier expectativa distinta no tiene en estos momentos una posibilidad de tener concreción", aseguró Zapatero.
Esta era la respuesta a la oferta lanzada el martes por el líder de CiU, Artur Mas, que desde Londres y a raíz de las protestas que simpatizantes de ERC llevaron a cabo frente a la sede de una emisora radiofónica, señaló que "hay partidos a los que les gusta la bronca permanente", dijo y advirtió que estas acciones "no benefician al conjunto de la sociedad".
En declaraciones antes de pronunciar una conferencia en la London School of Economics, Mas aseguró que no pretende imponer un cambio de alianzas parlamentarias ni en Cataluña ni en España, aunque admitió que hay "un proceso en marcha", en el que vislumbra un mayor entendimiento con el PSOE.
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