El 57% de la población mundial cree que la corrupción ha aumentado
Los partidos políticos reciben la peor puntuación en el Barómetro Global de Corrupción 2005
Más de la mitad de la población mundial considera que la corrupción ha empeorado en los últimos tres años, y que esta tendencia continuará en el futuro, según los datos del Barómetro Global de Corrupción 2005, que fue presentado hoy coincidiendo con el Día Muncial de la Lucha contra la Corrupción, y que pone de relieve la desconfianza del público hacia los sistemas políticos y de justicia nacionales, con los partidos políticos, los parlamentos, la policía y el poder judicial como los sectores más afectados por la corrupción.
El Barómetro Global de la Corrupción de Transparencia Internacional recoge las percepciones de más de 50.000 personas de 69 países respecto a cuáles son las esferas de la sociedad que se ven más afectadas por este problema, si la corrupción ha aumentado o disminuido y si prevalecerá en mayor o menor medida en el futuro. Además, examina en detalle el soborno y presenta información sobre la frecuencia con que las familias pagan los sobornos, la manera en que realizan estos pagos, si se paga para tener acceso a los servicios públicos y las sumas que se pagan.
En este aspecto, el caso español resulta especialmente significativo, ya que ninguna de las personas que participaron en la encuesta -500, entrevistadas por Sigma II- habían pagado algún tipo de soborno en los últimos doce meses. No es el caso de países como Uruguay, donde un 43% de los entrevistados aseguró haber entregado sobornos en el último año.
Los políticos, los peores
Los hallazgos del Barómetro "resultan una denuncia a los sistemas políticos y de justicia en todo el mundo", asegura el propio informe. En concreto, los partidos políticos reciben la peor puntuación en general, y fueron considerados el sector más corrupto en 45 de los 69 países. Entre ellos se encuentra España, donde los partidos políticos recibieron una puntuación de 3,4 (en una escala de 1 a 5, en la que 1 equivale a 'sin corrupción' y 5 a 'muy corruptos'), una mejora de cuatro puntos respecto al año anterior, cuando recibió un 3,8, y tres décimas por debajo de la media de Europa occidental, situada en 3,7.
Todas las regiones sitúan a la clase política en la cima de la corrupción, excepto África, donde en primer lugar aparece la Policía, que recibe un 4,4. La peor nota global se la llevan los políticos latinoamericanos, que recibieron un 4,5. A nivel global, el Barómetro muestra un empeoramiento de la opinión global, ya que el año pasado 36 de un total de los 62 países participantes calificaron a sus partidos políticos como las instituciones más corruptas.
Continuando con la situación española, la opinión pública sitúa, por debajo del sector político, a las autoridades fiscales y el sector privado o de negocios como los más corruptos, y considera que las organizaciones no gubernamentales y el sector educativo son los menos afectados por este problema. Uno de los aspectos que diferencia a España con el resto de países que participan en el Barómetro es la percepción de la corrupción en las entidades religiosas, que recibieron una puntuación de 3, frente al 2,5 de la media de Europa occidental.




