López Caro aprieta el acelerador antes de viajar a Málaga
Juan Ramón López Caro, entrenador del Real Madrid, ha traído aires nuevos al vestuario del conjunto blanco y hoy planificó una sesión de trabajo en la que los futbolistas se exprimieron al cien por cien, como hacía tiempo que no se veía en una sesión en la Ciudad del Real Madrid.
La plantilla parece haber captado en tiempo récord el mensaje de López Caro. Mucho sacrificio, trabajo y alegría en los entrenamientos. Y eso es lo que se vio durante los 75 minutos que duró la sesión previa al encuentro contra el Málaga de mañana.
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En el partidillo, todos los jugadores demostraron estar comprometidos y se emplearon, incluso en ocasiones, con excesiva dureza, a una velocidad más de lo que era habitual en las últimas semanas.
De hecho, Robinho recibió un fuerte golpe en la pierna derecha de Raúl Bravo de la que se recuperó rápidamente y lo mismo le pasó a Zinedine Zidane, a quien Helguera le dejó un 'recado' en la pierna izquierda.
Dos de los futbolistas que más destacaron fueron Sergio Ramos en el centro del campo y Robinho. Al brasileño se le ve más adaptado y con más alegría en las últimas semanas y suyas fueron las mejores jugadas del día.
El partido, en el que no se sacaron conclusiones para el duelo contra el Málaga, terminó con empate a un gol, por lo que tuvieron que recurrir a una improvisada tanda de penaltis en la que fallaron Ronaldo y Raúl Bravo y acertaron Zidane y Roberto Carlos.
Al finalizar, y mientras los perdedores hacían flexiones y abdominales, Zidane y Baptista estuvieron probando su suerte en los lanzamientos de falta desde fuera del área. Mención especial para el brasileño, que arrancó los aplausos de sus compañeros por su efectividad. El único que no pisó el césped fue David Beckham debido a una gastroenteritis, aunque mañana es baja por sanción.
