El Rey pide que ante las tensiones prevalezca la moderación y el sosiego

En su tradicional discurso de Navidad, el Rey don Juan Carlos ha repasado los principales asuntos que han marcado la actualidad de este año que termina, teniendo una especial referencia a la Constitución, la tensión política, varios asuntos de calado social y el 30 aniversario de su coronación. El propio monarca ha resumido de forma sencilla el contenido de su mensaje: "Frente a las tensiones y las divisiones, debe prevalecer la firme determinación de intentar superarlas desde la moderación y el sosiego".

El Rey, cuyo mensaje ha comenzado con un emotivo recuerdo a "cuantos padecen cualquier tipo de sufrimiento o grave dificultad", ha querido resaltar que "las últimas décadas de nuestra historia no tienen precedentes en términos de paz, progreso y libertad". Llegar a esta situación, según don Juan Carlos "no ha sido fácil". "Lo conseguido es fruto de los sacrificios de todos los españoles, que supieron superar rencores y divisiones". Esta situación fue, según el Rey, la responsable de alumbrar la actual Constitución.

Sobre la Carta Magna, el monarca ha señalado que "el respeto y la lealtad a sus reglas, valores y principios y sin el esfuerzo de todos, no podría explicarse ni la modernización vivida por España, ni la envidiable estabilidad política, económica y social".

Don Juan Carlos hace referencia a las actuales reformas autonómicas y la 'tensión territorial'. Ante las dificultades "debemos esforzarnos por resolverlas en común acuerdo. Para ello debemos recurrir al diálogo responsable y sincero, dentro del respeto a nuestro marco constitucional, utilizando los cauces institucionales y democráticos, favoreciendo siempre el predominio de lo que nos une, nunca de lo que nos pueda separar".

Y añade en este sentido, "mi mensaje de esta noche es bien sencillo. Frente a las tensiones y las divisiones, debe prevalecer -por parte de todos- la firme determinación de intentar superarlas desde la moderación y el sosiego". "Confío plenamente en que las instituciones y los partidos sabrán servir fielmente al interés general, y al deseo mayoritario del pueblo español de preservar y ensanchar nuestra armónica convivencia".

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"Acabar con el terrorismo es prioritario e inaplazable"

Acabar con el terrorismo sigue siendo para el Rey "un objetivo prioritario e inaplazable", para lo cual "debemos incrementar nuestros esfuerzos". Pero para ello debemos seguir sabiendo "que contamos con los instrumentos del Estado de Derecho, la acción de la Justicia y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y con una creciente cooperación internacional".

En esta cuestión, el monarca tuvo de nuevo un sentido recuerdo para las familias de las víctimas del terrorismo, "a las que nos debemos y cuyo dolor nunca podremos compensar".

"No podemos permitir que inmigración sea sinónimo de muerte"

El mensaje de Navidad del monarca este año ha tenido una importante carga social. Don Juan Carlos ha pedido a la sociedad española, "una sociedad solidaria y de progreso", que se comprometa "con todo empeño en la lucha contra la pobreza, la marginación y la exclusión social".

También ha destacado su preocupación por el drama de la inmigración ilegal. "No podemos tolerar que prospere el tráfico de seres humanos. Tampoco debemos permitir que inmigración sea sinónimo de muerte, explotación o discriminación".

El Rey ha lanzado un mensaje de recuerdo y apoyo a los jóvenes, "capaces de contagiar ilusión, dinamismo, frescura de ideas y solidaridad". Y en relación a esto ha vuelto a reiterar su anhelo de "mejorar la educación y el fomento de la innovación tecnológica". Y para ello, don Juan Carlos sólo tiene una receta: "más y mejor educación, más y mejor innovación".

Por último, el monarca ha querido hacer un breve repaso de sus treinta años de reinado. Este 30º aniversario ha generado en él "un sentimiento de satisfacción por lo mucho que ha cambiado España, de admiración y gratitud a los españoles por su continuado esfuerzo, por su generosidad y solidaridad". Además, el monarca tiene un "sentimiento de fe en el futuro, de rotunda convicción de que, si juntos hemos llegados hasta aquí, es todavía mucho más lo que unidos podremos seguir alcanzando".

Sobre el futuro de la institución, don Juan Carlos promete a los españoles su entrega ilusionada y voluntad de servicio, algo que el "muy feliz nacimiento" de la Infanta Leonor, primogénita de los príncipes de Asturias, "amplía y garantiza".