La Justicia reconoce una demanda de paternidad de una mujer después de 10 años y cinco sentencias
El Supremo lo ha dictado por segunda vez tras una primera anulación del Constitucional
Después de cinco fallos judiciales contradictorios, la Sala primera de lo Civil del Tribunal Supremo ha dictado una sentencia -a la que ha tenido acceso la Cadena SER- en la que, por segunda vez, reconoce como cierta la demanda de paternidad presentada por una mujer que reclamaba que la persona que mantuvo relaciones íntimas con ella durante algún tiempo es el padre de su único hijo.
Han tenido que pasar 10 años para que finalmente el Tribunal Supremo haya aceptado de nuevo la versión de la mujer, y considere que el hijo nacido de una relación no matrimonial es hijo de la persona demandada. Unos años antes, ni el juzgado de primera instancia (el 3 de noviembre de 1995), ni la Audiencia Provincial de Madrid (el 7 de diciembre de 1996), reconocieron los hechos.
El Supremo lo ha tenido que reconocer por segunda vez, porque el Tribunal Constitucional anuló (el 14 de febrero de 2005) la primera sentencia del Supremo (el 10 de septiembre de 2002) por falta de argumentos sólidos.
Otra sentencia más motivada
El Alto Tribunal aseguró a principios de 2005 que la sentencia del Supremo era incoherente y vulneraba algunos derechos constitucionales del supuesto padre. El Constitucional decía que el hecho de que el padre se negara a realizar la prueba de paternidad, no era prueba suficiente aunque pudiera parecer un indicio valioso.
Así las cosas, el Constitucional anuló la sentencia y ordenó al Supremo que volvieran a redactar otra más motivada, y así ha sido. Ahora, el Supremo ha valorado además otras pruebas y ha reconocido la paternidad del demandado, ordenando la inscripción del menor en el Registro civil con el apellido del padre.
El Supremo ha vuelto a aplicar a su modo el antiguo refrán de que "quien calla no otorga pero tampoco niega".
