El rey de Nepal devuelve el poder "al pueblo"
Las protestas populares obligan al monarca a entregar el poder
El rey de Nepal, Gyanendra, ha prometido que el poder ejecutivo "será devuelto al pueblo a partir de hoy", cediendo así a la presión popular tras más de dos semanas de huelga general y manifestaciones convocada por la alianza de siete partidos de la oposición para reclamar al monarca que restaurara la democracia.
El rey había dado un autogolpe el 1 de febrero de 2005, asumiendo el poder absoluto tras destituir al Gobierno democráticamente electo y disolver el Parlamento, iniciando un periodo caracterizado por la violación de los Derechos Humanos.
AGENCIAS
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En su discurso en televisión, el rey nepalí, presionado dentro y fuera del país, anunció que "los poderes ejecutivos que manteníamos, los devuelvo al pueblo. Esperamos que se restaure la paz y el orden en el país, al proteger a la democracia multipartidista".
"El poder soberano debe estar con el pueblo", apuntó el monarca, quien pidió además que "regresen al camino correcto los que estén en el camino equivocado", en una clara alusión a la guerrilla maoísta que lleva una década de insurgencia en Nepal.
Los partidos no lo consideran suficiente
La renuncia de Gyanendra conlleva la convocatoria inmediata de elecciones. El monarca ha pedido a los partidos políticos que presenten a sus candidatos para primer ministro y ha prometido elecciones democráticas. El rey podría permanecer como una figura representativa en el país, siempre y cuando, la nueva Asamblea Constituyente que se cree tras las elecciones se lo permita.
Sin embargo, los partidos políticos no se dan por satisfechos con estos gestos y mantendrán las movilizaciones hasta que el monarca no comprometa oficialmente la convocatoria de las elecciones.
