Los diputados mexicanos siguen sin alcanzar un acuerdo para liberar la tribuna
La investidura de Felipe Calderón como nuevo presidente podría trasladarse de lugar
Los dirigentes de los partidos políticos representados en la Cámara de Diputados no han logrado solucionar la crisis en la Cámara baja, que amenaza con entorpecer la ceremonia de investidura del Felipe Calderón como presidente de México.
El presidente de la Cámara de Diputados, Jorge Zermeño, quien ha sostenido negociaciones con los coordinadores parlamentarios de los partidos políticos, ha informado a la prensa de que no hay acuerdos concretos de solución a la crisis iniciada cuando legisladores de izquierda y derecha se enfrentaron a golpes para hacerse con la tribuna, que no han desalojado.
Más información
En esa tribuna está programado que el conservador Felipe Calderón tome posesión como presidente de México el próximo viernes. "Estamos transitando en algunos acuerdos", ha adelantado Zermeño, quien ha asegurado que se ha abierto un espacio de varias horas para "concretar algunas cosas".
El presidente de la Cámara ha explicado que el conservador Partido Acción Nacional (PAN), al que él pertenece, y el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), enfrentados en esta crisis, han pedido hasta mañana, jueves, para "concretar algunas cosas", pero no ha dado más detalles. "Cuando menos, alcanzamos a que haya entre los compañeros que están en el recinto parlamentario respeto, que haya un pacto de civilidad", ha asegurado el diputado.
Después de los puñetazos, patadas e insultos de ayer, los diputados de ambos bandos han mantenido hoy una actitud menos belicosa y no ha habido nuevos rifirrafes. Zermeño ha declarado que los legisladores asumirán el compromiso de asistir el próximo viernes al Congreso para la ceremonia de toma de posesión de Calderón.
Esta será la segunda noche que una treintena de legisladores de ambos bandos pasen la noche encaramados en la tribuna del Congreso, mientras otras decenas de diputados permanecen en sus escaños o en pasillos del recinto, que tiene 500 bancas.
Cambio de sede
No sería la primera vez que se produce un cambio de sede en una toma de posesión en México. Varios presidentes hasta la década de 1970 rindieron "protesta" en otras ubicaciones diferentes al Congreso como el Palacio de Bellas Artes e incluso en un estadio.
"Definitivamente sí se puede realizar en una sede alterna. La Constitución ni dice que en un lugar específico sino sólo ante el Congreso", ha asegurado el director del Seminario de Derecho Constitucional de la Facultad de Derechos de la Universidad Nacional Autónoma de México, Edmundo Elías Musi.
La carta magna se limita a señalar que el presidente debe tomar posesión de su cargo ante el Congreso, y para Musi el Congreso se refiere a los legisladores no a la sede. Incluso, el portavoz de presidencia, Rubén Aguilar ha afirmado que el presidente saliente Vicente Fox "estará donde se realice la sesión de Congreso general para entregar la banda".