El Pizjuán se queda pequeño para el Sevilla-Real Madrid
En las próximas horas no habrá ni una sola entrada para presenciar el Sevilla-Real Madrid. En las taquillas del estadio Ramón Sánchez Pizjuán se colgará el cartel de "No hay localidades" para el partido del próximo sábado (22.00 horas) que enfrentará a los hispalenses, terceros con 28 puntos, y a los madridistas, segundos con 29.
El club augura que no tardarán en venderse las escasas entradas que en estos momentos quedan disponibles, por lo que el estadio sevillista registrará un lleno hasta la bandera, abarrotando sus 45.500 localidades para ver el choque entre los dos equipos que acechan al líder, a uno y dos puntos del FC Barcelona.
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El Sevilla FC tuvo que cerrar esta campaña la admisión de abonados cuando se superó la cifra de los cuarenta mil, debido a que debía reservar aforo para los pases federativos, patrocinadores y también para los seguidores e invitados del equipo rival.
Ampliación del estadio
El equipo está creciendo en lo deportivo. Tras lograr la temporada pasada su primer título europeo en la historia, la Copa de la UEFA, este año el objetivo es clasificarse para la Liga de Campeones, pero sin renunciar a nada. El equipo crece, la afición también, y el estadio se queda pequeño, con lo que en las próximas semanas el club andaluz hará público el proyecto de remodelación y ampliación del Sánchez Pizjuán, que aumentará su aforo en un mínimo de diez mil localidades y en máximo de veinte mil, según anunció hace algunos días su presidente, José María Del Nido.
Para el partido del sábado, el club prepara la formación de un mosaico en las gradas en los prolegómenos del encuentro, por lo que se repartirán entre los asientos cartulinas rojas, blancas y doradas.
