Al menos 19 muertos tras los nuevos bombardeos de Líbano contra las milicias de Fatah al Islam
Los combates duran ya trece días
Al menos tres soldados libaneses y 16 civiles han muerto este viernes en el campo de refugiados palestinos de Naher el Bared en los tiroteos entre el Ejército de Líbano y militantes islamistas. Cubiertos por disparos de artillería, decenas de tanques y vehículos blindados del Ejército libanés se han apostado en el exterior del campamento de refugiados, en las afueras de la ciudad de Trípoli. Según fuentes de seguridad, otros 18 soldados han resultado heridos.
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Unos 50 tanques y vehículos blindados se han situado en la zona norte del campamento y se dirigen a las zonas más adelantadas. Mientras, nubes de humo se elevan desde el interior del campamento, utilizado como base por los miembros de la organización Fatah al Islam en los enfrentamientos que mantiene desde hace 13 días con las fuerzas libanesas.
Durante los tres últimos días, disparos esporádicos habían puesto en entredicho la frágil tregua alcanzada. Por el momento no hay cifras claras de muertos, debido a la imposibilidad de entrar en el campamento, del que han huido gran parte de sus refugiados. El Gobierno ha prometido acabar con los milicianos, que aseguran que lucharán hasta el final.
Los refugiados palestinos huyen
En medios de los combates, más de 25.000 refugiados de los 40.000 que habitan en el campo de Nahr Al-Bared han huido al campamento cercano de Beddawi. En Líbano, viven cerca de 400.000 palestinos, según Naciones Unidas.
El Gobierno acusa a la milicia islamista, inspirada en grupos como Al Qaeda, de mantener retenidos a miles de palestinos como rehenes para impedir el asalto del Ejército. El recrudecimiento de los ataques cuenta con el total apoyo de la OLP. "Se tomó una decisión calculada para entrar al campo de refugiados para aniquilar a esta banda, asegurándose de que los civiles no resulten heridos", declaró el embajador de la OLP en Líbano, Abbas Kaki.