Detenido en Las Palmas un narcotraficante cubano reclamado por EEUU

El pasado viernes 10 de agosto fue detenido el cubano Darli Velázquez Armas, sobre quien pesaba una Orden Internacional de Detención expedida por las autoridades judiciales del Distrito Sur de Florida (Estados Unidos). Según explica la Jefatura Superior de Policía de Canarias en un comunicado, el detenido, de 33 años de edad, resultaba ser un reputado miembro de una organización criminal operante en el área de Florida (Estados Unidos), más concretamente Miami, encargada de introducir de forma ilegal en dicho país importantes partidas de sustancia estupefaciente.

Dicho individuo había sido condenado por estos cargos y escapó de ese país el pasado mes de marzo tras abonar una fianza de un millón de dólares. Se conceptuaba por las autoridades norteamericanas como "extremadamente peligroso, como se podría comprobar a lo largo de la intervención, teniendo una condena pendiente de 30 años a cadena perpetua por las Autoridades judiciales norteamericanas".

Fue localizado en una urbanización de lujo

Se detectó su presencia en España a principios de junio, cuando en la localidad de Majadahonda (Madrid) es localizado en una urbanización de lujo, intentando proceder a su detención, siendo en este caso negativa. El fugitivo, al verse sorprendido por la presencia policial mientras conducía un vehículo de gran cilindrada, no dudó en arremeter contra la policía, causando graves daños a los vehículos que le perseguían y lesiones a sus ocupantes.

En aquella ocasión se detuvo a uno de sus colaboradores, el cual se enfrentó contra la policía al objeto de facilitar la huída de Darli, hecho que consiguió en esa ocasión. Su pista se perdería en Madrid, hasta que es nuevamente detectado en la isla de Gran Canaria, concretamente en la localidad de Vecindario. Allí fue localizado en un domicilio particular, desde donde presuntamente seguía manteniendo comunicaciones con el resto de la organización, constatándose que continuaba con sus actividades ilegales.

Tras establecer un amplio dispositivo en torno al fugitivo, se detectó su salida a bordo de un coche de lujo y se emprendió una persecución desde la localidad de Vecindario hasta Las Palmas de Gran Canaria. Una vez en la capital, de nuevo intentando eludir la detención, se internó en el Cementerio de San Lázaro y emprendió la fuga a pie por el mismo, intimidando a las personas que allí se encontraban.

Según relata la Jefatura, finalmente, "y no sin usar gran resistencia", fue detenido y puesto a disposición judicial del Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional de Madrid, donde se tramitará su extradición, ingresando mientras la misma se produce en prisión.