El bueno, el feo y el malo: Brad Pitt, Woody Allen y Cassey Affleck
El director estadounidense Woody Allen y los actores Brad Pitt y Cassey Affleck han animado hoy la Mostra de Venecia, con sus películas: "Cassandra''s Dream" y "The assassination of Jesse James by the coward Robert Ford". Dos películas muy diferentes, porque cada una ahonda en mitos muy distintos: Allen, en el suyo propio, el sentido tragicómico de la vida; y Pitt y Cassey, en el general de Estados Unidos, su violenta historia.
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"La vida es algo tremendamente trágico con momentos cómicos", dijo Allen en la rueda de prensa de presentación de la película en la sección fuera de competición Maestros de Venecia. E insistió: "Cassandra''s Dream" es "la historia de dos personas muy agradables que acaban abocadas a una situación trágica".
"Cassandra''s Dream" es el nombre de un pequeño velero comprado por dos hermanos de la clase obrera, encarnados por el escocés Ewan McGregor y el irlandés Colin Farrell, cuyos sueños acaban derivando en pesadillas. La tercera película de Allen (1935) en el Reino Unido se inscribe en el lado trágico de su filmografía, al igual que su primera película de ambiente londinense, "Match Point" (2005).
Lo más feo en la película de Allen ha sido el abucheo que recibió en la sala de cine la distribuidora del film en Italia, después de que los responsables del festival tuvieran que cancelar tres de las proyecciones previstas y reducir los pases a dos.
Una película sobre el lejano oeste
La cinta de Pitt y Cassey, "The assassination of Jesse James by the coward Robert Ford", está dirigida por Andrew Dominik y alimenta los mitos de la historia estadounidense, a través de la leyenda del forajido Jesse James, contada ya al parecer en 135 ocasiones por el cine norteamericano.
Pero en esta ocasión, la leyenda adquiere caracteres bíblicos con un asesinato de Jesse James, interpretado por Pitt, a manos del cobarde Robert Ford, encarnado por Affleck, retratado de tal forma que recuerda el sacrificio de Jesús, traicionado por Judas, ante los ojos de María Magdalena.
La película, que dura 155 minutos, se enmarca dentro del genero del lejano oeste, según reconoció Pitt en rueda de prensa, y representa la tensión entre la admiración y el odio por los pistoleros.