Un atentado suicida deja 31 militares afganos muertos en Kabul
El terrorista suicida se inmoló en un autobús militar, por lo que la mayoría de los fallecidos son soldados.- El número de heridos se eleva a 29.
Kabul
Un atentado suicida contra un autobús del ejército afgano ha dejado al menos 31 muertos y 21 heridos en la capital de Afganistán, Kabul. La cifra de muertos podría aumentar, ya que se desconoce el número de civiles afectados. Los talibanes se han atribuido la autoría del atentado, y elevan el número de muertos a 35.
El vehículo se había detenido frente a una sala de cine para recoger a los soldados, cuando un hombre vestido de militar trató de subir al vehículo, aproximadamente a las 6.45 de la mañana (hora local), según informó el portavoz del Ejército, general Mohamad Zahir Azimi.
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"Normalmente, hay gente que verifica las identidades de los soldados que quieren abordar el autobús", ha declarado Azimi. "Mientras realizaban la revisión, el terrorista trató de subir y se voló ahí
mismo", ha asegurado el general .
La fuerza de la explosión hizo que el vehículo se partiera en dos y que los comercios de los alrededores se vieran también afectados. Se teme que también hayan perdido la vida algunos civiles viandantes.
"Durante 10 o 15 segundos fue como si hubiera caído una bomba atómica. Había fuego, humo y polvo por todos lados", ha asegurado Mohamad Azim, agente policial presente en el momento de la explosión.
Pocas horas después un portavoz de los talibanes reivindicaba la autoría del atentado. "Sí, uno de nuestros muyaidines llevó a cabo el ataque, y mató a 35 soldados del Ejército afgano", declaraba a Efe el portavoz guerrillero Zabiullah Mujahid.
Duro ataque
Se trata de uno de los ataques más sangrientos que se producen en Afganistán desde que los talibanes fueran obligados a abandonar el poder tras los atentados del 11-S. "Fue una tragedia terrible, un acto de extrema cobardía", ha declarado el presindente afgano, Hamid Karza. "Quienquiera que lo hizo actuó contra la gente, contra la Humanidad, definitivamente contra el Islam", ha añadido.
El pasado 17 de junio, la capital afgana ya vivió un episodio similar de violencia, con la explosión de otro autobús de instructores policiales frente a los cuarteles de la Policía que causó la muerte de 35 personas y heridas a 35 más. Ese atentado fue el más grave registrado desde la caída del régimen talibán en el año 2001.
En Afganistán han muerto en lo que va de año más de 4.100 personas víctimas de la violencia, que se ha recrudecido en los últimos meses.
