Cada vez menos contribuyentes marcan la casilla de la Iglesia
La Conferencia Episcopal Española ha presentado hoy su Plan de Comunicación para informar a la sociedad sobre el nuevo modelo de asignación tributaria acordado con el Gobierno
Cada vez son menos los ciudadanos que marcan, a la hora de hacer su declaración del IRPF, la casilla por la que se asigna a la Iglesia católica una parte de sus impuestos. Los datos proceden de la última encuesta sobre Opinión pública y política fiscal, elaborada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
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La Conferencia Episcopal Española ha presentado hoy su Plan de Comunicación para informar a la sociedad sobre su labor y sobre el nuevo modelo de asignación tributaria acordado con el Gobierno a finales de 2006. De este modo, persigue informar a los españoles de las líneas básicas del acuerdo de financiación alcanzado en diciembre del año pasado entre la Santa Sede y el Estado, por el que se elimina la dotación directa del Estado a la Iglesia, se aumenta la asignación directa del IRPF del 0,5 al 0,7 por ciento y se elimina la exención del IVA.
Según el CIS, en el año 2007 han marcado en la declaración de la renta la casilla de la Iglesia católica el 23,9% de los contribuyentes. Un año antes la proporción fue del 27,2%.
La encuesta de este año se ha elaborado a partir de 2.473 entrevistas realizadas entre el 12 y el 18 de julio pasado, justo después de que acabara la Campaña de la Renta 2006.
Las cifras revelan que el 18,3% de los encuestados marcó exclusivamente la casilla de la Iglesia Católica, frente al 22,5% de un año antes.
Las ONG también caen
Hubo, además, otro 5,6% que puso la cruz tanto en la casilla de la Iglesia como en la de otros fines sociales, cuando en 2006 eran el 4,7%.
Pero no sólo se ha reducido el porcentaje de contribuyentes que deciden dedicar una parte de su liquidación de impuestos a la Iglesia, ya que, en el caso de las ONG, ha caído del 26,8% al 25,3%.
No obstante, conviene matizar que estas cifras provienen de una encuesta y que no será hasta dentro de varios años, cuando se publique la Memoria de la Administración Tributaria, cuando se conozcan los datos reales.