Ramón Calderón: "No hace falta decirse cosas desagradables"

Madrid

Los presidentes de Atlético de Madrid y Real Madrid han comenzado a dirimir el derbi del próximo domingo (19:00 horas, PPV) en la Cadena SER. Ante los micrófonos de 'El Larguero' ambos bromearon a seis días del gran partido. Enrique Cerezo manifestó que la relación de presidentes es "de hermandad", sin los piques de la época de Jesús Gil y Ramón Mendoza, mientras que Ramón Calderón añadió que "no hace falta que nos digamos cosas desagradables, porque se llenarían dos estadios igual en un partido como estos".

José Ramón de la Morena quiso saber cómo viven ambos presidentes los partidos del eterno rival. Cerezo aseguró que no ve los partidos del Real Madrid. "Me da exáctamente igual lo que haga, no me interesa", manifestó. Por su parte, Ramón Calderón aseveró que él siempre va "con el Atlético de Madrid" y quiso desmontar el mito de que los presidentes deben calentar la previa de partidos como estos: "En este tipo de encuentros se llenarían dos estadios de cualquier forma. Si yo digo algo desagradable a Cerezo sólo incito a que las aficiones hagan lo mismo".

La temporada pasada, un gol legal anulado a Perea evitó que el Real Madrid perdiera en el Calderón (1-1). Cerezo contó que cuando ve las repeticiones por la televisión del palco suele expresarse con un "me parece que ha sido...", mientras que Calderón aseguró que "ya es un milagro que los árbitros acierten tanto".

¿Un 'vikingo' en la directiva rojiblanca?

Ramón Calderón bromeó con Cerezo al afirmar que en la comida de directivas están encantados de juntarse con Arturo Fernández, consejero del Atlético de Madrid, "porque es del Real Madrid". El presidente rojiblanco salió al quite: "Arturo tuvo la mala suerte de que le cogieron celebrando un gol del Madrid en el palco del Bernabéu, pero sólo lo hizo porque iba representando al CEIN".

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Recuerdos en los derbis

Enrique Cerezo recuerda con especial énfasis un derbi en el que el Atlético goleó por 0-4 al Real Madrid en el Bernabéu (temporada 87-88), pero no sólo por el resultado: "El entrenador era Menotti y le regalamos un coche, un BMW, por la victoria. Sin embargo, le echamos a las cuatro semanas y yo me quedé con el coche. Lo tueve hasta hace poco. Era un gran coche".

Y Calderón, le devuelve el 0-4: "Fue en la penúltima jornada (2002-2003), con dos goles y un partidazo de Ronaldo. La siguiente jornada ganamos la Liga ante el Athletic de Bilbao".

Cerezo, de familia madridista

El presidente rojiblanco reconoce que su padre y sus hermanos "son del Real Madrid", a lo que Calderón le responde que es "lo lógico". "Tenemos 380 millones de madridistas en el mundo, según un estudio", asegura.