EE UU investiga a Barclays por negocios con países de la 'lista negra' terrorista
La entidad británica podría afrontar una multa por las transferencias de personas o empresas sospechosas para Washington
Londres
El Barclays, el tercer mayor banco del Reino Unido, está siendo investigado por el Gobierno de Estados Unidos por presuntos negocios de su división estadounidense con países que forman parte de su lista negra terrorista, según ha publicado hoy el diario The Daily Telegraph.
Según el periódico, la investigación ha sido iniciada por el Departamento de Justicia y por la Abogacía de distrito de Nueva York y se refiere a pagos hechos en dólares a través de la división del Barclays en esa ciudad estadounidense.
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Los pagos habrían sido hechos por personas o empresas de países que forman parte de esa lista negra, que incluye, entre otros, a Cuba, Irán, Corea del Norte, Sudán y Siria.
Estados Unidos prohíbe a los bancos efectuar transacciones en dólares para clientes de estos países con el objetivo de reducir la capacidad de los terroristas para financiarse.
En su informe de los resultados anuales de 2007, el Barclays reconoció el pasado 19 de febrero en una de las notas explicativas la existencia de la investigación, y señaló que todavía no es posible prever ni la fecha de su finalización ni su efecto financiero, pero advirtió de que podría ser "considerable", apunta el Telegraph.
Durante los últimos años, los bancos estadounidenses han tenido que adaptarse a esta ley, que ahora está siendo impuesta también a las entidades extranjeras que operan en el país.
El banco ABN Amro tuvo que pagar en 2005 una multa de 80 millones de dólares (52 millones de euros, al cambio actual) y en la actualidad está en negociaciones que podrían desembocar en un acuerdo por un asunto similar que podría conllevar un pago de 500 millones de dólares (329 millones), señala el rotativo.
Asimismo, el HSBC, el mayor banco de Europa, reconoció ayer que tiene una pequeña oficina en Teherán (Irán) y que, si ésta violara las leyes estadounidenses, ello tendría "serias consecuencias legales y para su reputación", según añade el diario.