Hasta 5 grabaciones y 3 citas implican al líder de Manos Limpias con el caso de corrupción en Totana
Miguel Bernard asegura en declaraciones a la Cadena SER que sólo se reunieron una vez
El líder del sindicato ultraderechista Manos Limpias, Miguel Bernard, implicado en el caso de corrupción de Totana, en Murcia, se reunió con uno de los principales intermediarios no una vez, como asegura en declaraciones a la Cadena SER, sino al menos tres veces y mantuvo hasta cinco conversaciones telefónicas. Así se desprende del sumario que instruye el Tribunal Superior de Justicia de Murcia. Según las conversaciones telefónicas que figuran en el sumario, Bernard asesoró a este intermediario, para que no fuera apartado de una operación de tres millones de euros, una comisión ilegal que negoció el ex diputado popular Juan Morales.
Más información
El máximo representante de Manos Limpias Miguel Bernard, en sus declaraciones a la Cadena Ser, primero reiteró no conocer a ningún imputado en el caso de corrupción de Totana, en Murcia. Más tarde, admitió su relación con Emiliano Óvide - uno de los principales imputados en este caso de corrupción -. Bernard aseguró que sólo le vio una vez para recibir un dossier. A la pregunta "¿Usted ha hablado por teléfono con el señor Óvide, si o no?", Bernard responde: "Pienso que no he hablado, he hablado con tanta gente. Creo que con él la única reunión que tuve fue cuando entregó ese dossier en la cafetería esa, y nada más. Yo no le he asesorado en absoluto, para nada, y menos cobrar".
Según el contenido del sumario judicial, Miguel Bernard, líder de Manos Limpias, se reunió hasta tres veces con este intermediario amigo suyo y mantuvo al menos cinco conversaciones telefónicas. Las citas tuvieron lugar en Madrid, en la calle Ferraz, frente a la sede de Manos Limpias. Tanto las reuniones como las conversaciones grabadas por la Guardia Civil transcritas en el sumario, apuntan a que Bernard conocía la trama del presunto cobro de comisiones ilegales del ex diputado popular Juan Morales, porque asesoró a uno de los principales imputados en dos sentidos: para no fuera apartado del negocio, y, si así fuera, recomendarle otro gabinete de abogados que le llevara el asunto.
Según Miguel Bernard, el intermediario le entregó un dossier que "incautó la policía judicial a los dos días". El contenido del sumario judicial revela que desde que Miguel Bernard recibió los documentos hasta que la Guardia Civil lo requisó pasó más de un mes, el día 26 de noviembre, fecha de explotación de la Operación Tótem. Al tiempo que los agentes registraron el domicilio particular y dos empresas del intermediario y amigo de Miguel Bernard, la Guardia Civil irrumpió en la sede de Manos Limpias para que Bernard, mediante requerimiento judicial, entregara el dossier que comprometía al ex diputado popular Juan Morales.