La subida de la morosidad a su nivel más alto en ocho años se ceba en las cajas de ahorro
La Asociación Española de Banca admite que el sector tiene que acostumbrarse a crecer un 5% y advierte que habrá trimestres de crecimiento negativo en el conjunto de la economía
La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas de ahorro y cooperativas de crédito a particulares y empresas ha subido en abril hasta el 1,302%, con lo que encadena diez meses consecutivos al alza y se sitúa en niveles que no alcanzaba desde hace más de ocho años, cuando en marzo de 2000 marcó el 1,339%.
Según estos datos del Banco de España, el alza de los préstamos dudosos de cobro ha tenido especial incidencia en las cajas, que han superado por primera vez a las cooperativas de crédito desde que este indiciador inició su tendencia al alza hace diez meses.
Este dato supone un incremento de 0,176 puntos respecto a la tasa registrada el mes anterior, cuando se situó en el 1,126%, y contrasta con el nivel de abril del año pasado, cuando el indicador estaba en el 0,693%. Además, este repunte es la mayor subida experimentada por la tasa de morosidad en cinco años, desde que en abril de 2003 subió 0,98 puntos.
Aunque la morosidad ha repuntado con fuerza en los últimos meses impulsada por el aumento del paro y el encarecimiento del Euríbor, este 1,302% parece todavía poco si se compara con el 8% registrado en la crisis de 1993 y aún está lejos de la media europea, situada en el 2,5%.
Ante este deterioro generalizado de la coyuntura económica, el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, ha subrayado hoy que el crecimiento del crédito a ritmos del 20% era "insostenible", y que deberá hacerlo al mismo nivel que el PIB nominal, sobre el 5%, para que la economía se estabilice y vuelva a la normalidad, al tiempo que destacó que hay que aprovechar este momento de ajuste para evitar que se vuelvan a vivir situaciones como las que se produjeron antes del inicio de la crisis.
"Las entidades de crédito, la economía y los agentes tienen que acostumbrase a vivir con un crecimiento del crédito de este ritmo", ha subrayado Martín, que ha inagurado la segunda jornada del curso que organiza la Universidad Menéndez Pelayo y la APIE en Santander.
Abriendo el foco, Martín ha advertido de que es probable que la economía española continúe desacelerándose y muestre crecimientos negativos a lo largo del presente ejercicio.
Volviendo a los datos del Banco de España, desde enero de 2007, la tasa sólo ha registrado descensos en dos ocasiones, en marzo (0,686%) y junio (0,697%) del año pasado. En concreto, del volumen total de préstamos acumulados hasta abril, que superaba los 1,74 billones de euros, 22.741 millones de euros eran dudosos, lo que supone un incremento de 3.179 millones de euros respecto a marzo. Asimismo, en los últimos doce meses, el saldo acumulado del crédito dudoso aumentó en 12.079 millones de euros.
Estos datos excluyen los préstamos concedidos por los establecimientos financieros de crédito (EFC), que son entidades que pueden conceder créditos pero no captan depósitos y tienen una morosidad muy alta, que en abril fue del 3,653%. Por su parte, las cajas de ahorros, que aglutinan el 49% del volumen total de préstamos, registraron una morosidad del 1,468% tras aumentar en 2.052 millones en un solo mes, hasta 12.558 millones de euros, y ya superan el porcentaje de las cooperativas de crédito, de un 1,301%.
Las cajas, las que más sufren
En este sentido, el presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Juan Ramón Quintás, advirtió recientemente de que la morosidad aumentará "de forma importante" en España, y reconoció que es "imposible volver al crecimiento de los años anteriores" de las cajas españolas.
Con todo, la mayoría de las entidades del sector continúan lanzando mensajes de tranquilidad y destacan que estas tasas no son elevadas, al tiempo justifican el repunte en la subida de los tipos de interés y el precio de la vivienda, que hacen que las familias tengan que realizar un mayor esfuerzo para pagar sus cuotas mensuales. También influye en la subida de la morosidad el aumento del desempleo.




