Condenan a 30 años de cárcel a Silva Sande por ordenar el asesinato del doctor José Ramón Muñoz
La Audiencia Nacional considera probado que Silva ordenó que dieran muerte al doctor Muñoz Fernández, que fue asesinado el 27 de marzo de 1990 de tres disparos
Madrid
La Audiencia Nacional ha condenado a 30 años de cárcel al miembro de los Grupos Revolucionarios Antifascistas Primero de Octubre (GRAPO) Fernando Silva Sande por ordenar en 1990 el asesinato del doctor José Ramón Muñoz, jefe del equipo médico que trataba a los presos de la organización en huelga de hambre.
Segunda de la Sala de lo Penal considera probado que Silva Sande ordenó a los también integrantes de la organización terrorista Guillermo Vázquez Bautista y María Jesús Romero Vega a que dieran muerte al doctor Muñoz Fernández, que fue asesinado el 27 de marzo de 1990 de tres disparos en la consulta que tenía en el Paseo de la Constitución de Zaragoza.
El tribunal, integrado por los magistrados Ángel Luis Hurtado, Julio de Diego y Fermín Echarri, condena a Silva Sande por un delito de asesinato en calidad de autor por inducción a partir del testimonio incriminatorio que realizó Vázquez Bautista ante la policía y el juez de instrucción.
A esta prueba los magistrados unen la prueba pericial practicada durante el juicio, que acredita que en la vivienda que Silva Sande ocupaba antes de su detención se encontró la pistola semiautomática marca Star que fue utilizada en este asesinato.
Recibían las órdenes por teléfono
Durante el juicio, que se celebró el pasado 26 de junio, Silva Sande negó su participación en el asesinato y aseguró que él no dio la orden de asesinar al doctor, ya que, según dijo, era militante de los GRAPO pero no ocupaba ningún puesto de responsabilidad en la banda.
Por su parte, Vázquez Bautista declaró que él era el "único responsable" de su ''comando'' y que el acusado no le dio ninguna orden para llevar a cabo el atentado. Además, dijo que los miembros de los GRAPO no se conocían entre ellos y que recibían las órdenes "por teléfono". Es por ello que "al no poder verle la cara" no pudo descartar que efectivamente Silva Sande diese las instrucciones de matar al doctor.
En cualquier caso, Vázquez Bautista justificó sus declaraciones inculpatorias ante la policía al hecho de sufrir malos tratos. "Después de mi detención me hubiese comido hasta la muerte de ''Manolete''", aseguró.