El gobernador de Santa Cruz firma un acuerdo de diálogo con Morales

El gobernador de Santa Cruz, Ruben Costas, ha aceptado reunirse con el mandatario boliviano, Evo Morales, con quien firmará un acuerdo de diálogo para resolver el conflicto actual que mantiene con el presidente, agravado en los últimos días por el estallido de violencia en determinadas regiones del país donde se han enfrentado defensores y opositores al mandatario boliviano.

"Hemos decidido firmar este acuerdo para que se restablezca de nuevo la paz", dijo Costas a los periodistas. El acuerdo incluye una lista de cuestiones que los gobernadores derechistas discutirán con Morales. Asimismo, otros gobernadores de la oposición no ratificaron si aceptarían la oferta de negociación pero se espera que sigan la estela de Costas.

Asimismo, el documento define el futuro de la redistribución de recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos, la vigencia de las autonomías departamentales en la nueva Constitución Política y otras demandas sectoriales.

Presionados por sus bases, ya que no consiguieron sus objetivos con sus medidas de presión y frente a la proximidad de la Feria Internacional de Santa Cruz, los opositores al Gobierno decidieron firmar el documento y levantar el bloqueo de caminos.

Horas antes el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, pidió a los prefectos opositores que firmasen el documento donde se fijaban las bases para el inicio del diálogo en Cochabamba este jueves y que, además, ponía fin a todas las medidas de presión en la media luna.

Arresto de Fernández

Asimismo, Linera criticó que el acuerdo "haya sido frenado" por la detención del prefecto opositor Leopoldo Fernández, que fue arrestado por tropas del Ejército boliviano, después de que este martes fuera acusado de genocidio por la Fiscalía por instigar los actos violentos de la semana pasada que dejaron al menos 16 muertos.

Linero aseguró que el representante del Consejo Nacional Democrático (Conalde), Mario Cossío, está utilizando como pretexto su detención, ya que él fue informado sobre la detención de Fernández antes de que se iniciara el diálogo, informaron medios locales.

"Los temas de fondo reales que preocupa al ciudadano de a pie de Santa Cruz, de Tarija, de Beni y de Pando, pueden ser resueltos en las siguientes horas, una vez que se firme por parte de los prefectos, este documento, pero también les decimos que como Gobierno responsable y justiciero, las sanciones a las personas que han atentado contra vidas de bolivianos, las vamos a cumplir escrupulosamente", dijo el vicepresidente.

Finalmente Linera manifestó que los prefectos no deberían dar "ningún pretexto para firmar este documento, nosotros seguiremos esperando la firma de este documento, como una señal verdadera del compromiso con la paz, la tranquilidad y con el cumplimiento de las demandas regionales que encabezan estas autoridades departamentales".

Advertencia general

Este martes, ante el agravamiento de la situación, el Departamento de Estado lanzó una advertencia general a los ciudadanos estadounidenses para que no viajen a Bolivia y si se encuentran allí, que la abandonen.

Además de los dos vuelos especiales que saldrán en dirección a Perú, el Gobierno estadounidense recuerda que todas las compañías comerciales mantienen por el momento sus vuelos, salvo los de American Airlines, entre Bolivia y Miami, que han sido cancelados hasta el domingo.

"Animamos a los ciudadanos estadounidenses que están en Bolivia a abandonar el país si su situación se lo permite, y quien decida permanecer debe estar vigilante, estar atento a las noticias de los medios y tomar las medidas de seguridad que consideren", dice el Gobierno de EEUU en el comunicado.

"Los ciudadanos estadounidenses deben ser conscientes de que puede haber protestas y las calles puede ser bloqueadas, por lo que no recomendamos viajar a Bolivia". Además, alerta a los ciudadanos que ya están en el país de que los caminos a los aeropuertos pueden ser bloqueados sin previo aviso.

"Bajo ninguna circunstancia se debe intentar cruzar una barricada en la calle, aunque parezca que no hay nadie", advierte el comunicado.

Los ciudadanos "deben ser conscientes de que cualquier protesta que parezca pacífica se puede convertir en una confrontación violenta con las fuerzas de seguridad".